El Hospital Universitario preparó para el lunes 16 de abril dos actividades gratuitas por el Día Mundial de la Voz. A las 10, en el aula 1, el otorrinolaringólogo Alexander Sáenz dará una charla sobre los cuidados de la voz para profesionales y estudiantes de Locución y Comunicación Social, quienes además recibirán controles médicos pertinentes.
Luego, de 11 a 16, Sáenz junto con la fonoaudióloga Alejandra Echegaray realizarán para la comunidad y personal del Hospital el estudio de laringoscopia indirecta que detecta patologías funcionales y asesorarán sobre los cuidados de la voz. Las personas interesadas en recibir esta atención deben acercarse directamente a la secretaría de la Sala del Sector Amarillo.
Con esta iniciativa, el Hospital de la UNCuyo busca concientizar a la población sobre la necesidad de prevenir y tratar los problemas relacionados con la salud vocal.
La disfonía como enfermedad y su repercusión
Factores de riesgo. El uso de voz prolongado en el tiempo y el conjunto de determinados factores del ambiente de trabajo y biológicos pueden afectar la producción vocal. Existen los físicos, como lo relacionado con la acústica de los espacios; los químicos que contribuyen a las rinitis alérgicas por ejemplo; los tóxicos como el tabaco, el alcohol, e incluso los medicamentos que tienen efectos secundarios sobre laringe. Otros factores involucrados se relacionan con género, edad, estado de salud general, infecciones de vía aérea superior e influencias hormonales. También están los psicosociales como el estrés y por último los organizacionales vinculados con el tiempo de trabajo (años), carga horaria semanal, turnos, descansos y pausas, tipo de materia (idioma), entre otros.
Síntomas comunes. Cansancio vocal, ronquera, el dolor o ardor al hablar, la sensación de falta de aire, constricción en el cuello o sensación de tener algún cuerpo extraño en la garganta, la dificultad para tragar y la carraspera. Las disfonías pueden ser esporádicas o transitorias, crónicas y progresivas.
Cómo se provocan, previenen y tratan las alteraciones vocales. Los errores en el uso se pueden clasificar en dos grandes alteraciones. En primer lugar, el abuso vocal que incluye hábitos como chillar, vocalizaciones forzadas, o hablar excesivamente. La segunda es el mal uso vocal, que es el uso incorrecto del tono y de la intensidad de voz, con utilización de la respiración y las cavidades de resonancia de forma incorrecta. La consulta al otorrinolaringólogo para cualquier persona que esté más de una semana con disfonía es fundamental para prevenir problemas derivados de estas alteraciones. En ella se obtendrá el diagnóstico a partir del cual se indica un tratamiento fonoaudiológico para aprender una técnica vocal correcta.