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H.I.J.O.S., 10 Años de escrache popular

La agrupación Hijos por la Identidad y la Justicia contra el Olvido y el Silencio festejó sus diez años de vida. Para conmemorar la fecha, la agrupación organizó en Mendoza un escrache a Domingo Marcelini, un ignoto militar que está detenido en Santa Fé  acusado de delitos de lesa humanidad. Un genocida que ahora será visto con otros ojos por sus vecinos.

H.I.J.O.S. se inició el 14 de abril de 1995 como un espacio de representación de los hijos de detenidos desaparecidos, presos políticos, exiliados y fusilados de la ultima dictadura militar.

Su fin era contener a todos los que habían sufrido vejaciones durante la última dictadura militar. Los hijos de esa generación tenían un edad promedio de 18 a 20 años.

Las declaraciones públicas hechas por el ex marino Adolfo Scilingo donde reconocía el plan sistemático de la dictadura militar y los vuelos de la muerte para eliminar a los secuestrados de la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), despertaron a una generación que hasta el momento se debatía en la búsqueda de su identidad.

“A partir de ahí tomamos la decisión de agruparnos,  por ahí sin ideas claras en principio pero con la necesidad de juntarnos, de contenernos, de compartir una historia. Saber que nos había pasado lo mismo y tener ganas de expresarlo” contó a Agencia Taller Facundo Guerra uno de los primeros militantes de H.I.J.O.S. en Mendoza.

La lucha de esta organización naciente se sumó a la de otros organismos de derechos humanos como Madres de Plaza de Mayo, Familiares de detenidos  desaparecidos y Abuelas de Plaza de Mayo, para exigir juicio y castigo y terminar con la impunidad.

Los HIJOS también definieron como uno de sus ejes de acción la recuperación de sus hermanos expropiados y la utilización de la condena social para exponer a los represores de la última dictadura militar. Esa condena que se conoció con el nombre de escrache tiene como objetivo lograr el desprecio de la sociedad hacia los genocidas.

“Hoy festejamos que seguimos juntos, que seguimos peleando por nuestros objetivos, que nos sentimos mas fortalecidos; que no creemos que nos hayan derrotado. Y no solamente eso, sino que hemos cosechado muchos triunfos que por ahí en nuestros inicios no los pensábamos, como la nulidad de las Leyes de Obediencia Debida y Punto Final, o como la encarcelación de algunos genocidas”, agrega Facundo.

Un escrache por el aniversario

Como un modo de festejar estos diez primeros años de vida, la agrupación organizó un escrache a un ignoto militar que vive en pleno centro de Mendoza.

Violeta Ayles, una de las miembros más jóvenes de la agrupación relató a Agencia Taller en que consistió el acto de repudio: “Mas que nada hicimos una conferencia de prensa en el domicilio de un genocida, en calle Godoy Cruz 555 de Ciudad, que se llama Domingo Manuel Marcellini. Era el jefe del Departamento de Inteligencia Militar 122  de Santa Fe, y fue uno de los máximos  responsables de la represión durante la dictadura en esa provincia entre 1975 y 1978”.

Violeta informa con satisfacción que luego de declarar ante un juez de Santa fe el martes 5 de abril de 2005, Marcelini quedó detenido en el Batallón  de Anfibios de Santo Tomé.

“Que se entienda que acá estuvo viviendo durante años un genocida impunemente, gracias justamente a las Leyes de Impunidad”, agrega con pasión.

Y concluye: “Lo destacable de los escraches es que recibimos respuestas por parte de los vecinos. Lograr por ejemplo, que el verdulero no le venda más, que los vecinos no lo saluden al represor. Es un castigo y un castigo muy importante. No sé si es mas importante que la cárcel, sino decir que como vecinos y como sociedad te repudiamos; acá no vas a andar tranquilo. Bueno, por eso justamente nuestro lema es:“si no hay justicia hay escrache popular.

Guillermo Zárate

willyzarate2000@yahoo.com.ar

Departamento de Política

 

 

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