La semana que pasó hemos asistido a uno de los espectáculos más dolorosos que puede arrojar una sociedad: el fracaso del sistema escolar. Los alumnos que debían rendir materias que adeudaban, es decir quienes estaban en falta, no fueron directamente a sus exámenes o en un alto porcentaje desaprobaron.
En la página 4 del viernes publicamos en Diario UNO las opiniones de tres especialistas que abordaron la problemática. En esas pocas líneas quedó claro que Mendoza tiene suficiente materia gris para encarar estos temas, pues en esas opiniones hay infinidad de ideas novedosas y originales sobre lo que está ocurriendo. Habría que preguntarse si el sistema escolar tiene alimentación desde afuera o simplemente transcurre en una endogamia que lo hace dar vueltas sobre sí mismo.
Entre las muchas ideas interesantes de Estela Zalba, Juan Carlos Aguiló y Mónica Matilla, esta última esboza su teoría de la “enseñanza narrada”, por la cual se documenta lo hecho y se lo discute, pero no se hace la evaluación cualitativa de los resultados. Es decir que el sistema docente y directivo habla, discute, decide, aplica, pero no concreta una evaluación cierta del resultado de lo hecho, con lo cual se queda con la narración, pero sabe cuáles han sido los resultados concretos de lo hecho.
No está de más poner la lupa en este proceso si se tiene en cuenta que mañana se inician las jornadas docentes, una modalidad muy criticada, donde se lleva al paroxismo ese narrativismo hueco e inútil denunciado por Matilla.
El otro tema que se debe abordar de inmediato es el concepto de “analfabetismo funcional” expuesto por una docente de Lengua en la nota aludida, por el cual los alumnos tienen la destreza mecánica de la lectura, pero no comprenden lo que leen. El analfabeto funcional es muy peligroso, pues es alguien que cree que sabe lo que en realidad no sabe.
Como frutilla de la torta está el hecho ya evidente de que esos alumnos además de no saber que no saben, no les interesa no saber. Es decir que han perdido todo contacto con la posibilidad de volver a encauzarse en su educación. Este es un tema central, pues sólo a través de esa educación se podrá mejorar el resto de los problemas sociales, desde la seguridad hasta la salud.
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22 de noviembre de 2024