La Academia Nacional de Agronomía y Veterinaria sumará a sus filas a dos docentes de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Cuyo. Se trata del ingeniero agrónomo, Claudio Galmarini, titular de la cátedra de Horticultura y Floricultura, y de Ambrosio Rubén Bottini, titular de la cátedra de Química Orgánica y Biológica.
Galmarini dictará la Sesión Pública Extraordinaria que posibilitará su incorporación a la prestigiosa entidad el viernes 25 de agosto a las 11, en el Aula Magna de la Facultad. El Presidente de la Academia, Carlos Scoppa, será el encargado de abrir el acto y entregar el diploma y medalla al nuevo miembro.
Mientras que el Académico Nello Cucchi hará la presentación de Galmarini, quien disertará sobre “El mejoramiento genético de hortalizas y su vínculo con la salud humana, una oportunidad para la horticultura argentina”.
Ese mismo día, pero a las 16, la Academia Nacional de Agronomía y Veterinaria realizará la Sesión Pública Extraordinaria para incorporar a Bottini. En este caso, Scoppa también será quien realice la apertura el acto y entregue el diploma y medalla.
Mientras que el Académico Jorge Tacchini presentará a Bottini, quien disertará sobre “Fitohormonas, ¿cómo interpretan las plantas las señales del ambiente?”.
Breve historia
Las academias comenzaron a surgir en Argentina formadas por grupos de intelectuales idealistas que constituyeron instituciones de tamaño inicialmente modesto, divididas por especialidades de las ciencias y las artes que cultivan.
La Academia Nacional de Agronomía y Veterinaria fue creada en 1910, como dependencia de la Universidad de Buenos Aires, y está entre las veinte academias reconocidas hoy con carácter de “nacionales”.
En 1925 se transformó en una entidad autónoma pública no estatal, autorizada a reunir entre veinte y cuarenta personalidades para ocupar los lugares principales.
La Academia Nacional de Agronomía y Veterinaria reúne a un conjunto de personas con actuación destacada como estudiosos, investigadores, extensionistas, políticos, diplomáticos, educadores, funcionarios, profesionales prácticos y otras variadas formas de servir a la humanidad a través del protagonismo en las ciencias agronómicas y veterinarias. Entre los miembros de la Academia hay personas de diverso origen universitario y diferente perfil en su actuación profesional.