-¿Por qué usted piensa que no se deben aumentar las tarifas de la luz?
- En primer lugar, la ley 6.497 que es la que rige el marco regulatorio donde se desarrolla la actividad de las empresas concesionarias fija de qué manera se va a trabajar con las estadísticas. Hay un artículo - el 47- que dice que la tarifa tiene que durar hasta cinco años, donde hay un proceso de análisis y estudio de cómo se desarrolla la empresa. Es decir, qué tipo de inversiones ha realizado, qué tipo de producto esta entregando a los usuarios. Estudiar todo el marco en el cual la empresa se ha desarrollado. Hay otro artículo - el 48- que establece aumentos de emergencia o extraordinarios para las empresas. En la provincia de Mendoza solamente se definió los primeros cinco años de tarifa que son los que teóricamente continúan ahora, pero lejos de haber establecido una tarifa por el artículo 47 con todos los estudios necesarios. Por ejemplo, se tenía que ver la calidad del servicio técnico, que es deficiente porque la empresa ha sido multada innumerables veces por montos superiores a los diez millones de pesos. En lugar de seguir este procedimiento se ha optado por el artículo 48 que significa conceder el aumento extraordinario. Esto bajo una entidad jurídica nefasta que se basa en la Ley de Emergencia Económica nacional y luego provincial. Esta ley nacional prohibía el aumento de tarifas hasta tanto no se vencieran los contratos. En la provincia, con la sagacidad de las autoridades y el poder legislativo, se aprovechó este criterio para tratar de modificar las normas de fondo, en lugar de ajustar las partes necesarias para la emergencia económica. Acá se interpretó la emergencia económica a favor de las empresas y en contra de los usuarios.
-¿A qué se refiere cuando habla de modificaciones de fondo?
- Se quiere aprovechar esta coyuntura para modificar el reglamento de prestación de servicios como las multas y la duración de los cortes. Algo que en definitiva es el derecho de los usuarios. Hacer más ligth el reglamento de tal manera que esto no impacte en el bolsillo de las empresas. Por ende, menor calidad de servicio técnico. Esto va en contra de la filosofía privatista que pregonaba mejor calidad de servicios, más economía y más tecnología. En consecuencia, no se cumplen estos principios y carece de sentido la privatización. Si la empresa va a ser deficitaria, si va a tener deuda, sería lo mismo que fuera del Estado si igual el Estado tiene que subsidiarla. Eso es lo que está haciendo este gobierno con los aumentos de tarifas.
-¿Por qué los dueños de Edemsa dicen que la empresa está fundida?
- La empresa no está en condiciones económicas, mas allá del hecho que el grupo operador anterior (Electricité de France) cuando adquiere la empresa se endeuda por más de ciento veinte millones de dólares en un plazo muy corto, con lo cual se le produce un ahogo financiero. Pero esto no guarda relación con el tema de tarifa. La tarifa por si sola podría eventualmente haberlos ayudado. El punto de discusión es que aunque aumentará el 100% la tarifa, la empresa seguiría con ese ahogo financiero porque es muy grande la deuda.
-¿Por qué las empresas justifican que es necesario el aumento de las tarifas después de la crisis del 2001?
- La crisis del 2001, donde se rompe la paridad peso-dólar, es una farsa porque todos los aumentos de los servicios públicos tuvieron un margen para ser ajustados a las tarifas.
El ajuste fue muy pequeño pero siempre se realizó. Cuando fueron concesionadas las empresas tenían un marco adecuado para poder ir ajustando esos aumentos en los costos operativos. Con la excusa que las empresas ganaron en dólares, se quería hacer entender la idea a la gente de que si la empresa cobraba en dólares y consumía energía eléctrica que pagaba en pesos, a ellos no les convenía. Entonces pedían adecuación de tarifas porque veían que el volumen de ganancia de estas empresas petroleras era muy alto. Esta fue la excusa principal que no tiene justificativo de ningún tipo. Que uno este ajustado a las normas no quiere decir que tenga que desajustarse a las normas para poder tener más ganancia. Es lo que en definitiva está pasando y lo que refleja la relación de los gobiernos de turno con el grupo de poder.
-¿Cuál es la causa de los aumentos de las tarifas?
- Este problema está estrechamente ligado con la situación de Repsol YPF, ya que las empresas petroleras han tenido una ganancia extraordinaria. Si el costo del barril del petróleo está a 62 dólares no se puede entender que ellos lo puedan vender al mercado interno a costos internacionales, por encima de los 50 dólares. Solo se puede entender sí se comprende que las empresas se están llevando la renta nacional, que es la diferencia entre el costo de producción y el costo final de exportación. Por consiguiente se está empobreciendo al Estado. No se está realizando la tarea de exploración, están explotando los pozos que Y.P.F estatal había perforado; están utilizando las zonas de cateo que Y.P.F estatal había analizado. La reserva petrolera se ha reducido tremendamente: de un horizonte de 50 años ha pasado a uno de 9 a 11 años. En consecuencia habrá una crisis energética sin precedentes. Es decir, lo que va a llevarnos a una crisis energética es la falta de inversiones. Porque ellos tuvieron la oportunidad de realizar las inversiones, de hecho la plata la tuvieron porque la gente viene pagando la tarifa. Pero Edemsa, en general, no ha extendido las redes de manera necesaria y suficiente. Y esto es lo que no los hace captar nuevos usuarios. Además ven la extensión de red como un gasto que requiere inversiones que ellos no quieren realizar. Porque no quieren realizar ningún tipo de modificaciones hasta tanto no se resuelva el problema de tarifa. Ellos están como todas las empresas de servicios, como por ejemplo las de transporte: es el Estado el que les tiene que comprar los micros. Se están viendo favorecidas y subsidiadas directamente por el Estado. En este contexto no tiene sentido hablar de privatizadas. Si en definitiva el Estado le está dando los subsidios, es lo mismo que si fueran del Estado, con la gravedad que el dinero se está yendo del país y no genera mejoras ni nuevas fuentes de trabajo.
María Laura Salvo
Departamento de Política