Jorge Barón, vicerrector de la UNCuyo, visitó el penal de Boulogne Sur Mer para recorrer el Complejo Educativo donde la UNCuyo dicta 13 carreras pertenecientes a las facultades de Ciencias Políticas, Derecho y Filosofía y Letras. Alrededor de 110 estudiantes detenidos ejercen su derecho a la educación universitaria, pública y de calidad y lo hacen a través del Programa de Educación Universitaria en Contexto de Encierro (PEUCE).
Experiencia educativa en contexto de encierro. El camino comenzó con una guía a las antiguas y nuevas aulas donde se ejecuta el programa PEUCE. Allí el director del penal, Néstor Luvello, destacó la importancia de poder educarse. "Cuando la persona que está detenida accede a la educación se transforma en otra", expresó.
En ese ámbito Barón interactuó con universitarios del penal quienes comentaron cómo estudiar les cambió la vida, no sólo porque a través de ella pueden lograr una salida laboral sino porque los ayuda a mejorar la convivencia, la conducta, el dialecto y además adquirir conocimiento.
Por su parte José Rodríguez, coordinador del área de Articulación Social e Inclusión Educativa, explicó que la Casa de Estudios busca recrear el clima universitario y lo hace a partir del traslado de parte de su equipo docente y de tutores que intentan transmitirles los valores de la vida universitaria.
Huerta. La visita al penal continuó con el trayecto hacia la huerta universitaria, espacio en el que la UNCuyo trabaja con detenidos y personas interesadas en labrar la tierra y en aprender el oficio y el valor de la siembra. Se suman a esta experiencia estudiantes avanzados de la facultad de Ciencias Agrarias. Allí se cultiva remolacha, ajo y acelga, que luego se entrega a las familias de los detenidos.
Sobre este tema la coordinadora de PEUCE, Paula Petrelli, mencionó que además de garantizar la educación formal, se realizan otro tipo de actividades como la de la huerta que implica un proceso en la etapa de enseñanza-aprendizaje en el cuidado de plantas, de la tierra y el agua. "Lo hacemos con estudiantes de Ciencias Agrarias que comparten las prácticas con detenidos, algunos de ellos son estudiantes y otros son personas que les interesa trabajar la tierra y conocer los procedimientos para elaborar un producto ya sea una conserva o dulce", indicó.
Asimismo subrayó que pueden realizarla aquellos que tienen una conducta acorde para compartir el espacio con civiles o universitarios, y describió esta práctica como un lugar libre en la cual las personas aprenden a utilizar herramientas y a trabajar de manera autónoma.
Al final del recorrido Barón realizó un balance en el que calificó como "valiosísima" la manera en que el Programa se desarrolla a nivel educacional y en el contexto de encierro. Entiende, además, que para los detenidos significa "un cambio de mentalidad y de vida". En ese marco manifestó su intención de continuar, profundizar, ampliar y apostar a él, para que la gente que está en ese contexto pueda progresar y tener una actividad rentada.
Respecto a temas de seguridad Barón recalcó que la Universidad se proyecta desde la inclusión y desde la educación. "No creemos en esquemas represivos sino que creemos que podemos aportar a la formación e inclusión con educación y desde lo laboral; y ese es el rol de la universidad pública y en la que la UNCuyo está comprometida", puntualizó.
En tanto que José Rodríguez habló sobre el impacto de los programas formativos en los internos. "Tenemos la premisa de que la educación es un derecho para todos, sea cual sea la situación en la que estén los estudiantes - argumentó y continuó- en algunos casos, y no sólo en el contexto de encierro, no es fácil llegar al territorio y a poblaciones vulnerables que no tienen el estímulo inicial pero sí la vocación".
Remarcó que la UNCuyo como universidad pública no puede estar ausente de las políticas nacionales y sociales que se vienen desarrollando. "Tenemos que acompañar y poner todo el esfuerzo en profundizar este tipo de medidas", concluyó.
Acerca del PEUCE. Se desarrolla a través del Convenio de Cooperación Académica Universitaria ME 69/11, acordado por la UNCuyo, la Dirección General de Escuelas, los ministerios de Educación de la Nación y de Trabajo, Justicia y Gobierno de Mendoza.
Busca garantizar el derecho a la educación de las personas privadas de libertad, a través de dispositivos que habiliten el acceso, permanencia y egreso de los hombres y mujeres detenidos/as en las unidades carcelarias, a las ofertas educativas que la Universidad Nacional de Cuyo, establecidos para esta modalidad educativa.
Esta modalidad cuenta con la oferta educativa más amplia de la Argentina. En ella la UNCuyo ofrece desde la facultad de Ciencias Políticas y Sociales las licenciaturas de Trabajo Social, Sociología, Ciencia Política y Administración Pública y recientemente Comunicación Social. En Derecho la carrera de Abogacía y Filosofía y Letras las licenciaturas de Historia y Letras y Literatura, con sus respectivos Profesorados.
Acompañan este proceso un equipo de más de 20 estudiantes tutores disciplinares, los coordinadores de facultad que articulan con los docentes y el personal no docente de las unidades académicas. Además, más de 70 docentes garantizan la toma de exámenes finales y parciales y brindan consulta o clases complementarias.