La Facultad de Educación de la Universidad Nacional de Cuyo eligió el Día Internacional del Libro -23 de abril- como una fecha significativa para conmemorar a Daniel Israel, profesor fallecido el 6 de julio del año pasado. Su especialidad fue la literatura, se doctoró en Letras y la Psicolingüística y Literatura para niños, jóvenes y adultos fueron dos de los espacios curriculares que lo tuvieron como profesor titular.

En la Unidad Académica de la UNCUYO fue también investigador, secretario de Investigación y Posgrado, director del Instituto de Lectura y Escritura, y desde 2018 representaba a los docentes en el Consejo Directivo.

Del descubrimiento de la placa que impuso su nombre al Aula 3 del edificio del Campus de la Facultad de Educación, participaron la decana y vicedecana, Ana Sisti y Ximena Erice, el vicedecano de la Facultad de Filosofía y Letras, Gustavo Zonana y la hermana del profesor, Clarisa Israel.

Más adelante, su equipo de trabajo en Psicoligüística ofreció unas palabras en su memoria. En primer lugar habló Alejandra Martínez, quien señaló que no es tarea fácil hablar de Daniel porque su repentina partida los sumergió en una profunda tristeza que aún no pueden procesar. “Es un honor para Gabriela, para mí y para Leandro poder ofrecer a ustedes las palabras que brotan de nuestros corazones en este tan merecido y emotivo homenaje a la memoria de nuestro maestro el doctor Daniel Israel”.

Martínez realizó una semblanza de quien fuera “un profesor brillante, un intelectual, un líder, un soñador. un valiente, un crítico de la realidad. un ferviente defensor de la universidad pública, un fanático del cine, un lector voraz, un hijo maravilloso y un hermano amoroso, un gran maestro de vida y, fundamentalmente, el mejor amigo que alguien puede tener”. Sostuvo que compartir las aulas con él fue un privilegio “que atesoraremos para siempre”.

Por su parte, Leandro Ampuero agradeció “su generosidad infinita, su ironía y humor ácido, su valentía y su visión de la vida”, pero fundamentalmente su amistad pura y fiel. Recordó, además, su risa “estruendosa y contagiosa”, al igual que su “voz sabia y tranquilizadora”.

Luego, su hermana Clarisa recordó su amor por la lectura que lo acompañó desde que era un niño muy pequeño con varias anécdotas relacionadas con la literatura y el cine, dos de sus pasiones. Hacia el final de su intervención explicitó cuánto lo extraña y señaló la gran responsabilidad que siente por ser el último eslabón de su familia de origen. Agradeció el homenaje, al que calificó de “especial” y sostuvo que este legado permanecerá para las próximas generaciones. “Debo decir que no pude haber tenido un mejor hermano”, concluyó.

Las palabras de la decana Ana Sisti cerraron el acto. “Atender a la memoria y a los recuerdos de una institución, nos hacen pertenecer a ella, sentirnos parte, ser”, explicitó de entrada. La académica además describió la esencia del valorado profesor: “Daniel era Borges, era Cortázar, era Orozco y Sábato, era y siempre será literatura”, señaló en alusión a la elección del Día Internacional del Libro para recordarlo y poner su nombre a un espacio institucional.

Sisti finalizó el homenaje con palabras de despedida: “Fuiste y serás siempre parte de nuestra Facultad, nunca fue un adiós, más bien es un incansable hasta siempre”.

El acto se transmitió en vivo por Señal U Académico, por la situación sanitaria, y se puede ver en el link a continuación: https://youtu.be/1nNZpMzWPso