“Los trabajadores de la educación estamos de pie y en marcha hacia la casa de Gobierno para exigir aumento, blanqueo salarial y en defensa de la escuela pública como también del estatuto docente y mayor presupuesto educativo”, apuntó un maestro.
“Soy jubilada celadora y gano 200 pesos. No nos dan aguinaldo. Es una vergüenza trabajar toda una vida para ganar una miseria. Me duele mucho porque yo tengo 70 años y cobro 200 pesos”, dijo Elda Domínguez mientras marchaba junto a la bandera argentina de 400 metros que llevaban los docentes.
Ya en la explanada de la Casa de Gobierno, un docente de San Martín estimó que el acatamiento en su departamento fue del 95%. Consideró que “el paro se desarrolló con una propuesta clara y contundente para los trabajadores de la educación”.
Alberto Ortiz, docente de una Escuela Técnica del Este advirtió que “la lucha va a seguir y vamos a tener que proponer más días de paro, mas movilizaciones”.
“Esto se tornará muy difícil para el gobierno sino llega una propuesta clara, porque ojo, el enojo más que nada se produjo cuando llegaron las planillas que mandó el gobierno a las escuelas: los docentes se enojaron todavía más porque saben que la propuesta es una mentira rotunda. Entonces vamos a seguir luchando”, enfatizó.
Gustavo Correa, dirigente del Sindicato Unido de Trabajadores de la Educación (SUTE) apuntó lo señalado por Ortiz. Entusiasmado, explicó a Agencia Taller que “los casi 4000 compañeros de la educación movilizados le han dicho no a la propuesta del gobierno. A esa propuesta confusa y mentirosa”.
Entre los que marcharon se encontraba Francisco, otro celador llegado San Rafael, para participar de la manifestación. En su bono de sueldo figuran sólo $82 pesos como básico. Con los adicionales que le corresponden recibe en mano alrededor de 500 pesos.
“Es por todo esto que el gobierno debe pensar una respuesta digna”, concluye el Secretario General del SUTE, Gustavo Maure.
Guillermo Zárate
Departamento de Política
