En la Universidad de Buenos Aires (UBA) la incógnita habitual antes de cualquier elección -¿quién ganará?- pasó a segundo plano. Hoy, todos se preguntan, en cambio: ¿podrá esta vez hacerse la asamblea?
La tercera convocatoria para elegir rector -después de dos intentos, la semana pasada, frustrados por agrupaciones estudiantiles de izquierda que ocuparon la entrada del Colegio Nacional de Buenos Aires- está formalmente convocada para el martes próximo, a las 9, pero nadie se atreve a asegurar que podrá concretarse.
De hecho, los estudiantes que rechazan la candidatura del decano de la Facultad de Derecho, Atilio Alterini, ya convocaron a movilizarse nuevamente el martes que viene y hoy presentarán su "plan de acciones tendientes a impedir que este siniestro personaje sea rector". Los estudiantes cuestionan su actuación como juez y funcionario municipal durante la última dictadura, pero a la vez rechazan el carácter "antidemocrático" de la asamblea y la forma de representación en la UBA.
Según pudo saber LA NACION, los decanos y otros asambleístas que forman parte de la izquierda -y que llevan como candidato al investigador Alberto Kornblihtt- tuvieron contacto con los estudiantes para negociar una salida. Sin embargo, las conversaciones se complicaron esta semana.
En la sesión del Consejo Superior que puso fecha a la asamblea, anteayer, los estudiantes subieron la apuesta: pidieron que, antes de elegir al rector, la asamblea modifique el sistema de representación y se llame nuevamente a elecciones en todos los claustros. El cuerpo, como era esperable, sólo aprobó "iniciar las discusiones para reformar el estatuto".
"El diálogo es complejo. Estamos de acuerdo en la importancia de que se haya planteado el debate sobre Alterini, pero los estudiantes se quedan ahí. Nosotros pensamos que hay que tomar esto como una oportunidad política de abrir discusiones de fondo", dijo a LA NACION un asambleísta de la izquierda. "Los estudiantes entraron en una lógica de presión y ahora no pueden bajarse", apuntó otro.
Propuestas y preocupación
Además de Alterini y de Kornblihtt, continúan anotados en la carrera el actual rector de la UBA, Guillermo Jaim Etcheverry, y el ex decano de Agronomía Fernando Vilella.
Justamente Vilella presentó ayer formalmente sus respaldos. En conferencia de prensa, leyó nombres de 40 asambleístas que habrían comprometido su voto, de ocho facultades. "Presentamos un programa para una discusión que hoy no hay, porque una minoría no quiere que nadie plantee propuestas y una supuesta mayoría no quiere debatir", dijo a LA NACION. Propone una "segunda reforma universitaria" en 20 puntos, como elaborar un plan estratégico para la UBA, descentralizar funciones en las facultades, reformar el estatuto, promover concursos docentes y crear la figura del "defensor de la comunidad educativa".
Mientras tanto, crecen las expresiones de preocupación y alarma en distintas instituciones. El Consejo Permanente de Decanos de las Facultades de Derecho de las Universidades Nacionales, que agrupa a 24 facultades, difundió ayer un comunicado en el que rechaza la "campaña de desprestigio" y "falsas imputaciones" contra Alterini, a quien califican como "un intelectual agudo y dedicado que ha conseguido tener luz propia hacia el interior del campo jurídico".
En tanto, rectores de once universidades nacionales -Tucumán, Lomas de Zamora, Córdoba, San Luis, Litoral, del Sur, Rosario, La Plata, Cuyo, San Juan y Comahue- afirmaron que "la UBA es una referencia en el sistema universitario nacional y el perjuicio a su autonomía y a la posibilidad de elegir sus autoridades democráticamente es motivo de alerta para todos".
Por Raquel San Martín De la Redacción de LA NACION
Habrá testeos gratuitos de VIH y sífilis en la UNCUYO
28 de noviembre de 2024