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La Nación-Martes 23: Lanzó el Presidente el debate por la ley educativa

Kirchner pidió el compromiso de docentes, padres y alumnos

Con un llamado a “soñar la escuela que merecen nuestros hijos” y a “pensar el país para el largo plazo”, el Gobierno abrió oficialmente ayer el debate para dar forma a un proyecto de ley de educación nacional, que aspira a presentar en el Congreso en octubre próximo.
 
El presidente Néstor Kirchner firmó ayer el decreto que da comienzo a las discusiones, que se abrirán, en un ambicioso abanico, a docentes, padres, legisladores, universidades, partidos políticos, sindicatos, iglesias, empresas, ONG y movimientos populares, y que durarán seis meses.
 
Una imagen de la diversidad buscada se vio en la nutrida concurrencia al acto de firma del decreto, ayer, en el Salón Blanco de la Casa de Gobierno: 23 gobernadores, el gabinete de ministros en pleno, dirigentes sindicales, empresarios, rectores, legisladores, especialistas, académicos de educación y docentes, muchos de guardapolvo. Durante la ceremonia, los aplausos subrayaron las constantes alusiones a recuperar la igualdad a partir de la escuela y a poner la educación “al servicio de un país distinto”.
 
Kirchner estuvo acompañado por el vicepresidente, Daniel Scioli; el ministro de Educación, Daniel Filmus; jefe de Gabinete, Alberto Fernández, y el presidente de la Cámara de Diputados, Alberto Balestrini.
 
En el auditorio, entre otros, escuchaban la directora general de Educación bonaerense, Adriana Puiggrós; su par porteño, Alberto Sileoni; el líder sindical Hugo Moyano; Estela Carlotto; Hebe de Bonafini; el premio Nobel Adolfo Pérez Esquivel; el intendente de Morón, Martín Sabbatella; Alejandro Dolina; los ex ministros de Educación Juan Llach y Andrés Delich; el empresario Luis Pagani, y muchos docentes, los más entusiastas.
 
Los discursos coincidieron en ampliar el compromiso en el debate a toda la sociedad, en prevención de una de las críticas que se hacen a la ley educativa vigente: que no tuvo consenso en la comunidad educativa.
 
"Esta es una oportunidad de cambiar la historia", se entusiasmó el ministro de Educación, Daniel Filmus, sonriente y el primero en hacer uso de la palabra: "Hay que pensar el país en el mediano y el largo plazo. Eso es imposible sin educación, que es el único bien que permite que el país crezca. La dimensión educativa amerita que todos los ciudadanos participen y que la ley surja tanto de las tradiciones como de las esperanzas y los sueños de los argentinos", dijo.
 
El documento de base para el debate, que se difundió ayer, pone el centro en la construcción de un sistema nacional de educación, que elimine las desigualdades entre las provincias y dentro de ellas, y reduzca la fragmentación que impulsó la ley federal de educación, sancionada en 1993.
 
El documento adelanta diez ejes para el debate. Entre ellos, propone la obligatoriedad de la escuela media, que hoy sólo existe en la ciudad de Buenos Aires; pone la calidad como centro del proceso educativo, y resalta el derecho de las familias a participar en la educación de sus hijos. También se mencionan las condiciones materiales dignas para las escuelas, la introducción de tecnologías de la comunicación y el respeto por la multiculturalidad.
 
Para concretar las discusiones, según un apretado cronograma, la cartera educativa prevé jornadas de reflexión en las escuelas y en el ministerio, encuestas de opinión y un espacio en el portal educativo educ.ar ( http://debate-educativo.educ.ar  ) donde se podrá acceder a la agenda de reuniones, el documento de base y los aportes de instituciones y expertos.
 
"La alegría de enseñar"
 
El secretario general de la Ctera, Hugo Yasky, se llevó ayer aplausos entusiasmados con su discurso, en el que pidió "recuperar la alegría de enseñar y el espíritu de la escuela pública" y que "los docentes se sientan parte de una construcción social".
 
"En los 90, a los docentes nos proscribieron, nos prohibieron hablar. De ser objetos que hay que reconvertir tenemos que pasar a ser sujetos de derecho", afirmó Yasky, seguido en la palabra por los gobernadores de Catamarca, Carlos Brizuela del Moral, y de San Juan, José Luis Gioja.
 
Kirchner, que leyó la mayor parte de su discurso, fue el más explícito en pedir que la responsabilidad por la nueva ley se extienda fuera de los límites del Estado. "La ecuación educativa incluye una responsabilidad estatal, docente, familiar y personal de los estudiantes", dijo.
 
El Presidente colocó el proyecto de ley de educación en la línea de las leyes de financiamiento y de educación técnica, sancionadas el año pasado. "Hoy ponemos proa a la tarea central. Hay que dar de una vez por todas esta discusión, que será profunda y difícil, en la que tenemos que lograr una síntesis que refleje las coincidencias y nos represente a todos", afirmó.
 
Según el calendario, durante este mes se completarán las consultas a instituciones y especialistas. En junio será el debate general, con encuestas de opinión y jornadas en las escuelas. En julio se sistematizarán los aportes; en agosto se redactará un primer proyecto, que se someterá nuevamente a consultas de especialistas en septiembre. En octubre, el proyecto llegaría en el Congreso.
 
Aunque había ayer quienes se preguntaban cómo concretar los debates en todo el país, sobre temas técnicos y políticos complejos, en 180 días, la convocatoria sumó en principio adhesiones a sus principios generales.
 
El diputado nacional Francisco Delich dijo: "Es imprescindible recuperar la unidad del sistema educativo sin que esto implique recentralizar. Necesitamos incluirnos en el debate sin mirar tanto el pasado como la construcción del futuro". Por su parte, Mario Vicens, presidente de la Asociación de Bancos de la Argentina (ABA), aseguró que "recuperar la educación es una cuestión estratégica que exige la atención de la sociedad en su conjunto".
 
En el cierre de su discurso, Kirchner rescató "el espíritu de la carpa blanca, presente hoy aquí".
Por Raquel San Martín 

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