Creada por iniciativa del vicecanciller Miguel Angel Cortés durante la gestión de José María Aznar, la Fundación Carolina tiene como meta profundizar los lazos con América latina a través de un programa de becas, un fondo editorial y un programa de formación de líderes.
El plan de trabajo es ambicioso, más cuando las relaciones entre ambos país han sufrido las fricciones del default. Este tipo de acciones mitigan las consecuencias y alientan la formación de líderes \"de dos mundos\". De esto sabe y de esto habla Conde, madre de dos hijos, de 34 y 26 años, en una pausa en el programa preparado para su viaje a Buenos Aaires, señal del lugar que ocupa la Fundación Carolina en la agenda del Ministerio de Asuntos Exteriores. Tiene en América tres representaciones: la de la Argentina la preside Adalberto Rodríguez Giavarini.
Muchos puntos de coincidencia surgieron del diálogo con el ministro Filmus, y se anudó una relación con el rector Guillermo Jaim Etcheverri pensando en el futuro, porque las universidades \"serán el campo operativo del intercambio académico\". Hay mucho por hacer, cree Conde, especialmente en el terreno de la Justicia, según coincidió con el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Enrique Petracchi.
La Fundación Carolina estuvo a punto de naufragar en la transición política del PP al PSOE; sin embargo, salió fortalecida de la crisis. Cuando nació contaba con un presupuesto de medio millón de euros. Hoy suma 18 millones de la misma moneda. Se triplicó el número de becas y se amplió la base de empresas benefactoras. La silla del intelectual la ocupa el profesor Carlos Floria. \"Debemos tener más ´Florias´ en nuestra mesa\", acota Conde.
Su primer trabajo, apenas graduada, en los 70, estuvo centrado en la familia. Aquella investigación arrojaba datos soprendentes: España era entonces el país con el mayor índice de natalidad. \"Hoy tenemos el índice más bajo de Europa. La mujer se insertó en el circuito productivo y cumple un rol muy activo en la vida política\". Va un dato: \"En el gabinete de Rodríguez Zapatero hay paridad de géneros; 8 hombres y 8 mujeres\".
Así como Rodríguez Zapatero elevó el rango de Cultura en el gabinete, al nombrar ministra a la andaluza Carmen Calvo, puso al frente de la Fundación Carolina a una política con veinticinco años de militancia. Sobran las razones para pensar que estas instituciones mixtas, con financiación privada y gestión oficial, serán el canal de la diplomacia informal en los años venideros.