Durante una breve visita a Buenos Aires, la semana pasada, Tarso Genro, titular del Ministerio de Educación de Brasil, analizó junto a su par argentino, Daniel Filmus, esa posibilidad.
Ambos ministros también pusieron fecha para la reconversión, como escuelas bilingües, de dos establecimientos de la frontera brasileño-argentina. \"Aspiramos a que los presidentes Lula y Kirchner participen de la inauguración de estas escuelas el 4 de marzo próximo\", dijo Genro.
Desde que asumió el ministerio en su país, Genro (del Partido de los Trabajadores) tomó medidas que provocaron fuertes reacciones de todos los sectores políticos, incluida la izquierda, de la que proviene.
El funcionario brasileño explicó a LA NACION, en un castellano casi perfecto, que eligió Buenos Aires para pasar dos días de sus vacaciones porque debía organizar con Filmus la agenda del comité de trabajo que se reunirá este mes para prever la tarea de la conferencia internacional que se hará en octubre en Salamanca sobre el canje de la deuda externa por inversión en educación.
En esta visita del ministro brasileño se abrió \"un nuevo frente\" en la relación bilateral: la certificación de los posgrados. \"Esto es muy importante para ambos países y tenemos autonomía política y zonal, los dos ministros, para trabajar en ello\", dijo Genro.
–¿Qué tipo de posgrados serán certificados?
–Aún no está decidido. La idea es que se haga una reunión técnica en la que indiquemos qué es más importante para los dos países.
–Usted es uno de los impulsores de la ley que establece la enseñanza obligatoria del español en Brasil. ¿Por qué lo hace?
–Porque Brasil es minoritario en términos lingüísticos en América latina y como este continente tiene una formación lingüística española, la integración latinoamericana supone la absorción, por parte de Brasil, de esa lengua. Es muy importante que respetemos esta formación sudamericana y hagamos un esfuerzo para integrar el español en los programas de las escuelas brasileñas.
–¿Cuándo estima que comenzará a aplicarse en las aulas?
–Tenemos absoluta certeza de que en el primer semestre de este año será aprobada en el Parlamento. En estos días Lula me indicó que privilegiase esfuerzos para que esta ley fuera aprobada y para que tomase medidas inmediatas para aplicar esta obligatoriedad en todas las escuelas. Pero será aplicada gradualmente porque tenemos el problema de la formación de los profesores.
–Para la capacitación de profesores de español y portugués, ¿bastan los cursos que se están haciendo con grupos de docentes de ambos países? –No. Esto es un comienzo, una señalización de intereses mutuos. Queremos aumentar la licenciatura para la enseñanza de español en Brasil e integrar esta lengua en la currícula de las escuelas básicas de mi país.
–El programa \"Universidad para todos\", que usted puso en práctica, dispuso que las universidades privadas reciban a alumnos de escasos recursos y provocó una fuerte oposición. ¿Se está desarrollando y qué alcance tiene?
–El programa, que es una ley federal, está en curso y absorbe a 112.000 jóvenes de bajísimos ingresos. Es un programa de gran éxito si se piensa que todas las escuelas federales superiores absorben a 122.000 jóvenes. Tenemos dos posiciones contrarias: una, que tiene una visión privatista o elitista y entiende que esto es una intervención del poder público en la enseñanza privada. La otra posición es la de una pequeña parte de la ultraizquierda que no ha conseguido fundamentar su oposición. Es extraño porque repudiaron que el Estado usase sus recursos financieros para financiar becas a chicos pobres diciendo que es una renuncia fiscal. Es una visión que no tiene sustentación política en Brasil y que ha servido para un debate político acerca de la verdadera naturaleza de la izquierda dogmática y ortodoxa en el país.
–¿El Estado aporta dinero a las universidades en concepto de becas o subsidios?
–No. Es una desapropiación del 8,5%. Una gran parte de la educación privada superior aceptó esto porque entiende que tiene una función social importante.
–Lula dijo que 2005 sería el año de las inversiones educativas. ¿Hubo un aumento del presupuesto?
–Sí, se aumentó aproximadamente en un 30% en comparación con el año anterior.
–¿A qué se destinarán los nuevos fondos?
–A la enseñanza media y superior, para el programa de formación de profesores y una mejor remuneración de los maestros federales.
–¿Y la infraestructura?
–También, pero éste no es el problema fundamental de la educación en Brasil. –¿Cuál es?
–La formación y la remuneración de los maestros.