Encarado con un espíritu verdaderamente original, además de desarrollar temas sobre el aprendizaje de la lengua, en 28 videos, y de las matemáticas, en 12 videos, narra las historias reales de ocho personas que cuentan allí cómo fue su propio proceso de alfabetización, por qué les costó tanto luchar contra su vergüenza a confesar su condición de analfabetos y contra los prejuicios de los demás, para concluir con una carta escrita por estos alumnos testigos.
La realización de este material incluye también la colaboración de nombres tan conocidos como los de los directores de cine Eduardo Mignogna y Claudio Echeverry, y el músico León Gieco, que participaron en la realización y musicalización de los videos. Existe la firme intención de que estos documentales se emitan por televisión, además de ser usados como material didáctico durante las clases.
Pero otro aspecto sumamente interesante del plan es la incorporación de 10 mil alfabetizadores seleccionados entre jefes y jefas de hogar con buen nivel educativo, ex maestros, estudiantes universitarios, profesionales, abuelas y abuelos y hasta miembros de organizaciones barriales, preparados por 150 capacitadores especialmente designados. Todos los alfabetizadores cobrarán por su tarea un viático de 50 pesos en total, además de la cobertura contra riesgos de trabajo.
Quince son las provincias que participan de la experiencia, al final de la cual los alfabetizados recibirán un certificado que los habilitará para ingresar en cuarto grado de una escuela para adultos. Todo el plan está basado en técnicas pedagógicas desarrolladas por el brasileño Paulo Freire, conocidas como \"educación popular\". Por esa razón, además de trabajar vocales, consonantes y reglas ortográficas, los futuros educandos podrán discutir sobre conceptos y temas de interés colectivo como \"hay que vacunar a los hijos\", \"hay que respetar las leyes\", \"con el voto decidís tu futuro\", entre otros, volcados en afiches cuyo protagonista principal es Inodoro Pereyra, el popular personaje creado por el rosarino Fontanarrosa.
Esta apelación a un contacto tan directo con la realidad cotidiana demuestra una comprensión profunda de aquéllos a quienes está dirigido este \"Encuentro\", porque la labor de los alfabetizadores será también la de ir a buscar a sus \"alumnos\" casa por casa o a su trabajo. Experiencias anteriores indican que, por esa vergüenza que experimentan y el temor de ser rechazados, los analfabetos adultos no suelen participar de los planes alfabetizadores tradicionales.
Además, como también lo destacó el ministro de Educación, Daniel Filmus, esta campaña contará con la ayuda de instituciones como Caritas, PAMI, la Asociación de Padrinos de Escuelas Rurales (Apaer), y organizaciones no gubernamentales como Sustentabilidad, Educación y Solidaridad (SES), todas con conocimiento profundo de las dificultades que deben encarar los que han sido excluidos del sistema. Como este plan de alfabetización es muy flexible y está encarado \"como una política de Estado\" y -lo aseguró también el ministro- con mucho cuidado de no relacionarlo con ninguna ideología o partido político en particular, debe ser alentado desde todos los sectores, ya que puede transformarse en ese aporte concreto a la recuperación de los niveles educacionales argentinos, que alguna vez fueron tomados como referencia para todo el hemisferio, que tan reclamado es por los que creemos que en la educación sigue estando el futuro de la Argentina. Y tal vez, comprobada su efectividad, pueda pasar de plan piloto a programa que abarque todo el país.