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La Nación-Sábado 19: Sólo la mitad de las provincias tomará los exámenes finales

Lo había propuesto el ministro Filmus; en algunos distritos hubo protestas

22 de noviembre de 2005, 11:00.

Cuando falta menos de un mes para que concluyan las clases en todas las escuelas del país, los ministerios de Educación de doce provincias se preparan para tomar los exámenes finales integradores a más de un millón de alumnos que cursan los últimos tres años de la escuela media.
Las evaluaciones incluirán los contenidos vistos durante todo el año y medirán el conocimiento de los chicos en cuatro áreas básicas: matemática, lengua, ciencias sociales y ciencias naturales. La calificación será promediada con la nota general del año y definirá si el alumno aprueba la materia o no.
Este aspecto vinculante del examen suscitó la reacción de un puñado de adolescentes que durante toda la semana pasada cortaron calles y tomaron veinte escuelas en La Plata y en otros puntos del conurbano bonaerense. Los estudiantes aseguran que las pruebas benefician a los chicos que menos estudiaron durante el año y perjudican a los más aplicados.
"El objetivo es elevar los niveles de calidad de la enseñanza y de exigencia hacia los alumnos. Además, queremos contar con una instancia final que pueda integrar todos los conocimientos adquiridos durante el año", dijo el ministro de Educación, Daniel Filmus, a LA NACION.
La iniciativa fue ideada en febrero por el Ministerio de Educación, con el aval del Consejo Federal de Educación. En su momento, el acuerdo recibió la aprobación de las 23 provincias y la objeción de la ciudad de Buenos Aires, que decidió mantenerse al margen de las evaluaciones finales. "No estamos en contra de los exámenes finales. Pero nos encontramos en plena revisión del sistema evaluativo y aplicar estas pruebas ahora complicaría nuestros programas", explicó en su momento la secretaria de Educación porteña, Roxana Perazza.
 
Los doce distritos
Este año, los exámenes se tomarán sólo en las provincias de Buenos Aires, Catamarca, Chaco, Corrientes, Jujuy, La Rioja, Mendoza (que el año pasado comenzó a ensayar este tipo de pruebas), Misiones, Salta, San Juan, Santa Fe y Tucumán.
En el resto de las jurisdicciones aún no se estableció cuándo se desarrollarán las pruebas, según dijo el secretario de Educación, Alberto Sileoni. "Lo más probable es que las provincias que aún no fijaron una fecha tomen las pruebas a fines del año próximo. Cuando se firmó la resolución, quedó bien indicado que la medida se aplicaría en modo progresivo", señaló.
El funcionario anticipó que las pruebas serán tomadas entre la última semana de este mes y la primera de diciembre. "Cada jurisdicción es libre de poner la fecha que más le conviene y de preparar las evaluaciones", indicó.
Según Sileoni, Chubut y Santiago del Estero ya definieron que recién en el 2006 llevarán adelante los exámenes finales.
En la provincia de Buenos Aires, los exámenes finales serán tomados a partir del lunes 28 y alcanzarán a 580.000 estudiantes que cursan los tres años del polimodal.
Esto, como se dijo, causó la reacción de un puñado de alumnos de La Plata que cortó calles y marchó hasta la Dirección General de Cultura y Educación bonaerense, situada en esa ciudad. La protesta se extendió a otros distritos -Hurlingham, Avellaneda y Morón- y amenaza con prolongarse a otras escuelas del conurbano.
El director general de Cultura y Educación, Mario Oporto, afirmó a LA NACION que, pese a la persistencia de las protestas estudiantiles, las pruebas serán tomadas. "No habrá marcha atrás por más que los chicos protesten. Las pruebas se van a tomar", sentenció Oporto.
Y Sileoni, por su parte, dijo que en otras provincias hubo protestas menores. "Acá no se toma nada nuevo. Se pone en juego todo lo visto en el año. Por eso no entendemos la resistencia de algunos padres que objetan el valor de los exámenes", indicó.
Con las evaluaciones finales, y ante los recurrentes aplazos que sufren los chicos que intentan ingresar a la universidad, el Ministerio de Educación pretende elevar la calidad de la educación en los últimos años de la enseñanza media.
"La idea es compatibilizar criterios de evaluación que conduzcan a un régimen federal más homogéneo e integrado", explicó la subsecretaria de Equidad y Calidad del Ministerio de Educación, Mirta Bocchio.
La resolución 233/05 que estableció los exámenes finales en todas las provincias dispuso la creación de una comisión interjurisdiccional ad hoc de ministros. Ese cuerpo se dedicará al monitoreo y seguimiento de las acciones que se desarrollen en las jurisdicciones durante todo el proceso de evaluación.
Aunque algunos alumnos y docentes objetan que los exámenes finales los tomaron por sorpresa, la confección de las pruebas estuvo planificada, y la toma y la corrección estará en manos de los equipos docentes de cada una de las instituciones. Las pruebas no necesariamente tendrán que ser un examen escrito. Por ejemplo, en áreas como ciencias sociales puede consistir en aplicar los contenidos de geografía o historia en una monografía.
Consultada por LA NACION, la directora de la Escuela de Educación de la Universidad de San Andrés, doctora Silvina Gvirtz, consideró fundamental "no hacer de esta experiencia una bandera política, sino poder hacer un diagnóstico que permita mejorar la calidad de la enseñanza del secundario, hoy tan criticado".
Y Axel Rivas, del Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (Cippec), advirtió sobre los riesgos de profundizar las desigualdades si las pruebas no están bien aplicadas. dado que "quienes tienen menos recursos pueden resultar más perjudicados".
Por Jesús A. Cornejo  De la Redacción de LA NACION Con la colaboración de Cecilia Crego y corresponsales

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