Con movilizaciones masivas en la ciudad de Buenos Aires y en Córdoba, facultades sin clases y sedes tomadas por los estudiantes en varios lugares del país, los reclamos por mejoras salariales para los docentes y mayor presupuesto para las universidades alcanzó ayer su punto más alto de tensión.
Ahora, las miradas están puestas en la reunión que el lunes mantendrán los gremios docentes, los rectores y las autoridades del Ministerio de Educación, quienes anticiparon que llevarán "una reformulación de la propuesta de incremento salarial con una mejora".
Mientras ya comienzan a escucharse reclamos de alumnos por la prolongada falta de clases en las universidades, la Federación Universitaria de Buenos Aires (FUBA) y docentes de la UBA realizaron ayer una movilización desde la plaza Houssay hasta el Ministerio de Educación, a la que se sumaron estudiantes secundarios, trabajadores del hospital Garrahan y agrupaciones de izquierda. En la UBA, el paro tiene un acatamiento dispar, particularmente alto en Ciencias Exactas, Filosofía y Letras, y Ciencias Sociales.
Al mismo tiempo, en Córdoba, unas 20.000 personas volvieron a marchar por el centro de la ciudad. Allí, la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) y los colegios secundarios que de ella dependen llevan cinco semanas sin clases. Hoy, el rector, Jorge González, y algunos decanos se reunirán aquí con el ministro de Educación, Daniel Filmus.
En tanto, en la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), siete de sus 15 facultades y tres de sus cinco colegios se adhirieron al paro.
"Apelamos a que los docentes tengan un gesto y no convoquen a más medidas de fuerza como éstas, para privilegiar las negociaciones", dijo a LA NACION el secretario de Políticas Universitarias, Juan Carlos Pugliese.
 
Duplicar los fondos
 
Los docentes adheridos a la Conadu Histórica realizan desde hace casi dos semanas un paro para rechazar el aumento de $ 175 millones en los fondos para pagar salarios que otorgó el Gobierno nacional, equivalente a un incremento del 22,7%. Reclaman un aumento del 40%, que lleve el cargo testigo -ayudante de primera con dedicación semi exclusiva- a $ 800 y la incorporación al salario de las sumas fijas otorgadas como aumentos.
Según funcionarios de la cartera educativa, acceder a ese pedido implicaría unos $ 1200 millones adicionales a un presupuesto de casi $ 2500 millones, lo que consideran impracticable. Además, un nuevo incremento, aún menor, abriría la puerta a reclamos similares del resto de los empleados estatales. "Interrumpir el paro y las movilizaciones nos vendría bien para negociar mejor con el Ministerio de Economía", comentaron.
Por su parte, la Conadu y la Conadu Histórica se reunirán mañana en Córdoba para definir la posición que llevarán a la reunión del lunes.
*Raquel San Martín