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La Sinfónica interpretará obras maestras del barroco al impresionismo

Vuelve a Mendoza el maestro Rodolfo Saglimbeni para dirigir la Orquesta en concierto, el viernes 24, a las 20:30, en la Nave UNCUYO.

imagen La Sinfónica interpretará obras maestras del barroco al impresionismo

La Sinfónica interpretará obras maestras del barroco al impresionismo de la mano del director Saglimbeni.

Con una formación mayor, la Orquesta Sinfónica saldrá a escena con "Obras maestras del barroco al impresionismo". Para esta función se pone nuevamente al mando el maestro venezolano Rodolfo Saglimbeni. El espectáculo será el viernes 24 de septiembre, a las 20:30, en la sala Chalo Tulián de la Nave UNCUYO.

En la velada se interpretarán las Suites de “Música Acuática” de George Händel, “Introducción y Allegro” para arpa de Maurice Ravel con la participación de la mendocina Graciela Milana como solista y Sinfonía nº8 de Ludwig van Beethoven conmemorando el 250 aniversario de su nacimiento postergado desde la pandemia de 2020.

Las entradas se pueden adquirir en www.entradaweb.com.ar  o en boletería de la Nave (Maza 250, Ciudad) de martes a domingo, de 18 a 21, a un valor de 300 pesos general y 250 pesos para estudiantes, docentes, personal no docente y jubilados. Los asientos se asignarán por orden de llegada. 

El maestro Saglimbeni, quien se desempeña como director Artístico de la Orquesta Sinfónica desde 2015, regresa a Mendoza para dirigir los próximos repertorios de la Orquesta.

Las obras

Música acuática o Música del agua de Georg Friedrich Händel es una colección de movimientos orquestales, a menudo publicados como tres suites. Se estrenó el 17 de julio de 1717 a requerimiento del rey Jorge I para ser interpretada sobre el río Támesis. El concierto fue ofrecido por cincuenta músicos en una barcaza que navegaba cerca de la barcaza real del rey y se dice que este quedó tan complacido que se hubo de interpretar tres veces durante el viaje.

En 1905 la fábrica de arpas Erard le encargó a Maurice Ravel (1875-1937) una composición que mostrará las posibilidades de sus nuevas arpas cromáticas. Así surgió como obra de cámara su Introducción y Allegro, formalmente catalogado como un concierto en miniatura. 

Se cuenta que el inventor alemán Johann Mäzel se reunió con otros amigos de Beethoven en una cena de despedida para el compositor, quien estaba a punto de salir de viaje en 1812. Durante la fiesta, Mäzel describió su metrónomo con el cual esperaba proporcionarles a los compositores una forma de indicar el tempo con exactitud y proporcionar a los intérpretes una ayuda para una ejecución regular. Beethoven aplaudió la idea alegremente y de inmediato se lanzó a una canción aparentemente espontánea basada en el «ta ta ta» del instrumento de Mäzel. Los demás asistentes se unieron para convertir la canción en un rondó. Esta tonada intrascendente pasó a formar parte del segundo movimiento de la Octava Sinfonía, en la que Beethoven estaba trabajando en ese momento. La melodía cuenta con un acompañamiento acompasado sugerente del metrónomo.

La inclusión de este tema metronómico no es el único ejemplo de humor en la sinfonía. La obra abunda en pausas inesperadas, notas sorprendentes y gestos no preparados. También es ingeniosa la forma en la que finaliza el primer movimiento, con el corte repentino de lo que parece ser una nueva expresión del tema principal. El cierre excesivamente grandioso constituye una última humorada.

Concierto

Función: viernes 24 de septiembre, a las 20.30, en la Nave UNCUYO.

Director: Rodolfo Saglimbeni

-George F. Händel: Fragmentos de las Suites de “Música Acuática”

-Maurice Ravel: Introducción y Allegro para Arpa

Solista: Graciela Milana

-Ludwig van Beethoven: Sinfonía nº8 opus 93 en FA mayor

Graciela Milana - arpista

 

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