El electorado universitario define el 8 de junio por votación directa representantes estudiantiles, de egresados y personal de sus 11 facultades normalizadas y el Rectorado. Será por segunda vez una elección directa y simultánea y se pondrá a prueba el sistema de boleta única electrónica Vote E, que desarrolló la misma UNCUYO. La experiencia piloto se realizará en la Facultad de Ciencias Agrarias.
Más de 38 mil personas que estudian y trabajan en la UNCUYO pueden votar y elegir en forma directa a representantes ante el Consejo Superior y en los consejos directivos de las facultades. El electorado está integrado, en esta elección, por tres claustros. Están en condiciones de sufragar en forma simultánea, secreta y obligatoria un total de 38 220 personas. De ellas, 22 326 son egresados, 14 624 son estudiantes y 1270 integran el personal de apoyo académico. Se vota en 119 mesas habilitadas en todo el campus y en las sedes de la Universidad, distribuidas en 12 secciones electorales: rectorado y las 11 facultades.
El votante tiene que concurrir el miércoles 8 de junio entre las 8:30 y las 19.00 a la facultad en la que se encuentra empadronado –o el Rectorado– con documento de validez (nacional o internacional) y ahí recibirá dos sobres que colocará en urnas separadas: un sobre es para votar representantes para el Consejo Superior (identificado con el color rojo y la letra U de Universidad) y otro para elegir representantes para el Consejo Directivo; su adhesivo es azul y la letra F de facultad. Los padrones se pueden consultar en el sitio web http://www.uncuyo.edu.ar/transparencia/elecciones-2016.
Rector, vicerrector, decanos y vicedecanos duran cuatro años en sus funciones y pueden ser reelectos en el cargo por una vez. Por lo tanto no se eligen en esta oportunidad, como tampoco representantes por los docentes y por los auxiliares de docencia.
La actividad en todas las facultades y dependencias es normal, según lo estableció la Junta General Electoral. El transporte público de pasajeros circula con total normalidad.
El voto electrónico de la UNCUYO
Se trata de un software diseñado por la propia Universidad, que puede aplicarse en cualquier elección ya que por sus características técnicas es fácilmente adaptable. Se va a poner en práctica por primera vez para la elección de consejeros en la Facultad de Ciencias Agrarias.
Entre sus particularidades se puede señalar que el sistema se puede adaptar a cualquier elección a muy bajo costo –no está desarrollado exclusivamente para la UNCUYO– y no requiere que lo opere un técnico informático. Además se destaca que posee una invulnerabilidad que es, como mínimo, similar a otros sistemas que se utilizan en el país y en el mundo. También es confiable y transparente.
Es importante precisar además que este sistema garantiza –tomando las precauciones administrativas de rigor– el secreto del voto, al evitar la trazabilidad del elector.
¿Cómo funciona?
Permite elegir en una pantalla de computadora, de entre las distintas listas de candidatos, de a una categoría por vez de entre todas las que se elijan, proceso conocido como de “boleta única”. En esta ocasión, para su implementación en junio de este año, se prevé que la selección se haga con pantalla táctil y mouse –a elección del votante–.
Una vez que el elector realiza la selección de su preferencia el sistema imprime, en papel oficializado, el voto con un código de barras, que expresa la misma información que está impresa.
El votante deposita esa papeleta en la urna y desde ella se realiza, al final de la jornada electoral, el recuento utilizando el código de barras impreso en cada voto. Esto agiliza el escrutinio gracias a los lectores de código de barras. En caso de desearse, el sistema permite además la realización de un escrutinio tradicional con la carga de datos de forma manual. En la elección del 8 de junio en Agrarias, los electores utilizarán una sola boleta troquelada, de modo que, una vez hecha la selección, puedan separar los votos y colocarlos uno en cada urna: por un lado, la de Consejo Superior y por otro, la de Consejo Directivo.
Los resultados escrutados se cargan en un acta de escrutinio digital para la elección de Consejeros Superiores y otra para la de Consejeros Directivos, que se imprimen en tantas copias como fiscales y autoridades de mesa haya. Estas actas, que deben ser firmadas por autoridades de mesa y fiscales, poseen, al pie de la planilla con los datos, un código de barras que permitirá a la Junta Electoral General realizar con mayor velocidad el escrutinio centralizado.
Invulnerabilidad del sistema y transparencia
El sistema de votación no está, al momento en el que el elector realiza su opción, conectado a internet, ni tienen las máquinas utilizadas acceso a sistemas tipo Bluetooth, por lo que, sumado al hecho de que la CPU de la computadora está sellada y siempre a la vista de las autoridades de mesa y sin teclado disponible al momento de la elección, hace imposible el acceso al sistema desde el exterior, garantizando el secreto del voto.
Además utiliza acceso exclusivo a los archivos de datos, lo que significa que ni siquiera el creador del sistema tiene acceso a la información mientras se vota, ya que el mismo sistema bloquea cualquier acceso externo, aunque sea de un software ubicado en la misma CPU. Atendiendo a que el sistema no guarda ningún listado de los votos emitidos, sino que el archivo desaparece una vez mandado a imprimir, es imposible ingresar al sistema y saber qué votó un elector específico. La papeleta que el elector deposita en la urna tiene, de este modo, las ventajas de la boleta única y no presenta ninguna de las desventajas asociadas a otros sistemas de voto electrónico.
Para incrementar la transparencia se publicarán y difundirán los valores de los códigos de barra y su ubicación relativa –con la mayor antelación posible– para que cualquier elector pueda saber, antes de emitir su voto, qué debe decir el código de barras impreso al pie de su elección. También se darán a conocer las actas de escrutinio –luego de que la Junta Electoral las cargue– y el escrutinio realizado por la Junta Electoral, a medida que se va generando.