Por Alfredo González
Agencia Taller/Departamento de Política
alfredo3t@yahoo.com.ar
- ¿Qué expectativas tienen ahora las Abuelas de Plaza de Mayo, después de haber recuperado al nieto número 81?
- Nos da una gran confianza, una gran ilusión de este milagro que representa el encuentro con cada uno de nuestros nietos. Es demostrarle a los que todavía sostienen el olvido y la impunidad que es inexorable que la verdad, tarde o temprano, llega. Y no solamente porque los buscamos, sino también porque se hace el otro camino, el que ellos nos busquen a nosotros y el tener confianza, fe y esperanza de que van a aparecer otros chicos que tengan dudas. Cada vez que encontramos un nieto, ese nieto es un poquito de cada una de nosotras; le damos el cariño de todas las que todavía buscamos y no encontramos. Además creo que es una reparación para la sociedad argentina, porque cada chico que encontramos no solamente recupera su identidad sino que también el país la recupera. Sería imposible sostener que nada pasó, la existencia de centenares de chicos con identidades que no le son propias, eso sería medio enfermo; así que cada chico que se recupera es el triunfo, pero de todos.
Consultada por la figura del presidente, lo que éste representa y por su compromiso con la lucha de Abuelas de Plaza de Mayo, Carloto respondió: “él ha vivido esa época, sufrió la persecución porque era estudiante en La Plata cuando pasaba lo que pasaba y creo que justamente este compromiso personal lo ejecuta a través de su gobierno. No olvida, critica, habla, reivindica, rinde homenaje a sus compañeros en los lugares a los que va. Él habló de terminar la impunidad y estamos terminándola, que exista y prime la verdadera justicia. Hoy hay jueces que están en el banquillo de los acusados llorando, pero que van a caer porque fueron corruptos. Todo eso es un buen ejemplo.”
- ¿Se podría decir entonces que hay una buena relación entre Abuelas de Plaza de Mayo y el gobierno de Kirchner?
- Sí, hay una muy buena relación, hay un afecto, un respeto mutuo y hay un reconocimiento. No hacia el partido político ni a la persona sino a la gestión, porque está haciendo una buena gestión en favor del pueblo. No será perfecta, algunos lo critican, pero en dos años y pico no se puede revertir lo que se arruinó durante tantos años.
En un clima de absoluta cordialidad se la interrogaba a esta incansable luchadora respecto de que si atravesábamos, toda la sociedad argentina, por momentos de expectativa e ilusión de que las leyes en definitiva se cumplan y respeten, a lo que la abuela contestaba que en pocos años han conseguido la anulación de las leyes de Punto Final y Obediencia Debida, por lo que no hay olvido como muchos pretenden. Afirmó que son escuchadas, recibidas, consultadas y que por eso cree que estamos en un buen momento y que hay que aprovecharlo y valorarlo. Aunque es cierto que falta mucho todavía.
- ¿Qué opina de la justicia argentina a partir de la derogación de las leyes de Punto Final y Obediencia Debida?
- Ahora podremos conseguir justicia plena, aunque no va a ser fácil porque todavía hay jueces que ponen reparos y trabas. Estamos apurados porque hemos perdido 19 años en los que nos hicieron convivir con los torturadores, asesinos, ladrones y para volver a empezar hay que remontar causas archivadas, iniciar otras nuevas. Pero tenemos fuerzas y abogados dispuestos a acompañarnos. Creo que lentamente, no tanto como la justicia quiere, cada uno tendrá que rendir ante la justicia sus crímenes.
Estela en ningún momento dejó de resaltar la participación de los jóvenes en las manifestaciones, como así también en las actividades que se llevan a cabo desde la Asociación, al tiempo que rescató que “la juventud argentina vale oro”.
“Yo creo que el miedo se irá el día en que todos los argentinos tengamos justicia plena y el día en el que no se mate a un chico por la espalda porque tiene el pelo largo. Y eso depende del Estado, de la gente que nos gobierna y de nosotros también. “Aconsejó además a que nos apuremos para que tengamos un país con tranquilidad, con seguridad, con educación, salud.
Estela de Carloto se hizo presente en un acto realizado en la ciudad de Villa María, Córdoba, en el cual se la distinguió con un diploma de honor por su “incansable lucha y sostenido ejemplo por el respeto y plena vigencia del derecho humano a la identidad”, según aquellos que organizaron el acto. Recordó también a la abuela cordobesa Otilia Lescano, pionera de la filial de las Abuelas en Córdoba y fallecida recientemente.
Es en definitiva, en esa ciudad testigo de esta entrevista, en la que el destino cruzó los caminos de la Abuela luchadora más reconocida a nivel nacional y el periodista de Agencia Taller a quien, por haber estrechado un abrazo y apretón de manos a quien la vida la colocó en una posición en la que nunca se imaginó que iba a estar, como ella misma expresó, emocionó hasta el más duro de los sentimientos.