“Con temas como el de la cárcel todos discuten sobre el lugar, pero nadie se pregunta si eso es realmente lo que se necesita o se puede hacer mejor”, destacó Mario Romano, especialista en urbanismo.
El proyecto de investigación llevado adelante por los profesionales de la UNCuyo, se propone recopilar todos los datos sobre infraestructura y servicios de la provincia. A partir de ese relevamiento, se puede “pensar” el crecimiento de Mendoza de a cuerdo a las conveniencias y a las posibilidades del terreno y el acceso a medios. Según aseguran, los casos de planificación han respondido generalmente a intereses particulares de privados.
Respecto a la penitenciaría, los investigadores aseguran que no es conveniente hacer un solo complejo. Y que es recomendable construir cuatro cárceles de menor envergadura, una para cada circunscripción judicial. Así lo proponen en el escrito presentado ante la comisión bicameral de seguridad, hace un mes.
“La ONU recomienda que se instalen cárceles regionales que estén cerca del ámbito de los detenidos. Creemos que una por cada circunscripción judicial con capacidad para 400 personas es más conveniente”, aseguran los arquitectos, que también recomiendan la refuncionalización de la Granja Penal.
La construcción de viviendas es otro de los ámbitos que se critican. Según el informe, la planificación de los barrios deben ser tomadas como una inversión, donde se generan polos productivos. “Hay que asegurar el arraigo de la población; de nada sirve construir un barrio si no se tiene asegurado que la gente tenga trabajo en el lugar”, advirtió Romano, quien remarca la necesidad de convocar a distintos sectores para armar un Plan Estratégico de Desarrollo Sustentable. / P.I.