La consigna es llegar a fin de año con un promedio de siete en adelante. De este modo, de la calificación final de cada uno de los tres trimestres más el global debe surgir un total de 28 puntos. De lo contrario, el estudiante no tendrá otra opción que rendir nuevamente el mes que viene, entre el 21 y el 29 de diciembre según la asignatura pendiente. En algunas escuelas las clases de apoyo previas a las mesas de diciembre podrían verse afectadas en el caso de que haya demoras en la entrega de los resultados de los globales.
Con mayor o menor dedicación, en esta oportunidad los chicos en general han demostrado más interés desde que la modalidad comenzó a ser aplicada el año pasado. “Hemos notado una mayor dedicación de los alumnos porque ya no es una novedad”, evaluó Fernando Bula, director del Liceo Nacional Alfredo Bufano de Capital. Si bien allí explicaron que “todo se está dando normalmente”, es posible que los primeros días de la semana de apoyo previa a las mesas de diciembre coincidan con el día en que los chicos sepan si aprobaron o no.
Desde el punto de vista de los mismos docentes, la actitud y situación de los alumnos frente a la instancia actual se divide en tres. Por un lado están aquellos que aún rindiendo el global el promedio no les será suficiente. A la inversa, se encuentran quienes a pesar de haber contado con un rendimiento académico óptimo a lo largo de todo el año eligieron preparase para salir airosos. En medio de esos dos polos, se ubican los alumnos que tendrán la posibilidad de ‘salvar’ la materia rindiendo el global.
Para Belén (14), Tamara (14) y Gisela (15), de primer año de la EGB3, los globales “son fáciles para el que estudió y muy difíciles para el que no lo hizo”. Como ellas, varios alumnos de distintos colegios se mostraron preocupados por la instancia de examen durante toda la semana. “Fue medio difícil pero mejor que el año pasado porque tuvimos más tiempo para prepararnos”, explicaron Emanuel (12) y Gabriel (11), ambos alumnos de sexto año de la escuela Quintana de Capital.
El orden de los exámenes de cada asignatura, así como su formato, dependen de cada establecimiento y en particular, los docentes son quienes decidieron el sistema de evaluación. Así, una exposición, un trabajo práctico y hasta una prueba a carpeta abierta o la organización de una actividad recreativa también forman parte de los métodos destinados a integrar los conocimientos y habilidades enseñados este año.
Todo ello respetando la línea de contenidos y evaluación explicada durante el ciclo lectivo. Por eso los directivos analizaron los globales durante los meses anteriores.
Algo que los profesores mencionaron como una deuda pendiente es que los chicos deberían ir a la escuela esta semana sólo para rendir el global y no cursar el resto de las materias. “Es una situación muy estresante”, dijeron.
En las escuelas técnicas, los globales comenzaron el miércoles pasado porque cuentan con una mayor cantidad de materias. “La respuesta de los chicos ha sido muy buena”, dijo Matilde Bilakma, directora de la 4-104 de Luján. Lo mismo dijeron en la Pedro Nolasco de Los Corralitos.
La comparación
En las escuelas que dependen de la UNCuyo, los exámenes globales son distintos de los de los colegios provinciales.
Un global por cada uno de los dos cuatrimestres suma el 50% de la nota, que se promedia con la otra mitad que vale el global final. Al terminar el año, los alumnos deben contar con un 7 como mínimo para aprobar.
También en las escuelas especiales
Los chicos que concurren a las escuelas de enseñanza especial también deben cumplir la instancia de globales. Para ellos, la metodología de evaluación depende de las capacidades motrices e intelectuales que los docentes hayan trabajado durante todo el año. A diferencia del resto, ellos empezaron hace 16 días y continuarán hasta el martes 6 de diciembre.
Por otra parte, en algunos colegios no les ponen notas a los alumnos por estos exámenes. De todas formas, de acuerdo con la propuesta curricular de la escuela, el alumno tiene la posibilidad de demostrar e integrar las aptitudes y habilidades aprendidas durante los meses anteriores.
“El examen global para los chicos que pueden rendir depende de su patología y del área de conocimiento que el docente crea oportuno ayudarlo a mejorar”, explicó Silvia Páez, directora de la escuela María Angélica Zapata de Catena de Rivadavia. Allí concurren más de cien alumnos de ese departamento y Junín.
Zulema Usach zusach@losandes
