La participación de los estudiantes se transformó en el motor fundamental del evento, que está organizado por la organización Miles (Movimiento Independiente Latinoamericanista Estudiantil) y por la Facultad de Artes y Diseño de la UNCuyo.
Desde ayer y hasta mañana, más de mil estudiantes, graduados y autoridades universitarias de La Plata (Buenos Aires), Río Cuarto (Córdoba), Rosario (Santa Fe), de Uruguay, Chile, Ecuador, México y Venezuela se reúnen para dialogar y aportar propuestas para una reforma universitaria latinoamericana.
“Lo más importante es acercar conclusiones sobre la realidad actual de las universidades y ver qué cosas es necesario cambiar. Eso sólo se logra con el debate”, opinó Paula (24), alumna de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional de Cuyo.
Por ese motivo, la metodología de trabajo es a través de talleres, que se ponen en marcha a partir de la disertación de docentes, estudiantes y autoridades universitarias sobre planificación, políticas educativas, investigación, desarrollo tecnológico o financiación.
Durante el acto de apertura, Oscar Spada, rector de la Universidad Nacional de Río Cuarto, subrayó la idea de dejar de lado el viejo concepto de autonomía de la universidad y la necesidad de tender puentes con la comunidad, y dejar a un lado la idea de claustros separados.
Del encuentro participarán referentes latinoamericanos, como Heinz Dieterich, desde la Universidad Nacional Autónoma de México, y Héctor Soto, viceministro de Cultura y Desarrollo Humano de Venezuela (ver aparte).
Durante el acto de apertura del congreso, María Victoria Gómez de Erice, rectora de la UN Cuyo explicó que “es necesario integrar el sistema universitario latinoamericano, pero también hay que tener en cuenta otros sistemas consolidados como el de Europa”. 
El encuentro se transformó en una buena excusa para fortalecer el diálogo y apuntar a cambios dentro de la Universidad. En ese sentido, Walter Pérez, presidente de la Federación Universitaria de Cuyo (FUC) afirmó que el Congreso se transforma en una oportunidad “para reforzar la tendencia integracionista en América Latina, más allá de los acuerdos económicos y comerciales”.
Las actividades de debate y reflexión seguirán hoy y finalizarán mañana en la ciudad universitaria (ver aparte). Siempre con la consigna de hacer aportes para una reforma universitaria latinoamericana integral.
 
Cómo sigue
Hoy. A las 10, en el campo de Deportes de la UNCuyo, conferencia magistral. A las 15, talleres temáticos en Artes, Ciencias Políticas, Cicunc y Comedor Universitario. A las 19.30, mesa redonda en campo de deportes. A la noche, fiesta en el Comedor.
Mañana. A las 9, en el Campo Histórico El Plumerillo, homenaje a los Libertadores. A las 10, talleres sobre Ley de Educación Superior en las facultades. A las 12 y 16, conferencias magistrales. A las 19, recital en campo de deportes.
 
Los chicos dicen lo que piensan
Ayer comenzó el 8º Congreso de los niños, que reúne a alumnos desde jardín de infantes hasta EGB 1 y EGB 2, con el objetivo de que expresen sus ideas y opiniones acerca de temas propuestos por ellos. Este bloque se inscribe en el marco del 16º Encuentro de Teatro para Escuelas Primarias.
En el primer día del encuentro, cerca de 150 chicos fueron al teatro Quintanilla, de ciudad y debatieron sobre diversos tópicos, como la violencia, los derechos de los niños, y hasta Disney.
El Congreso apunta a escuchar las opiniones de los chicos y no se realizaba desde hace dos años. “Es un espacio de reflexión para los niños”, dijo Paulina Carnevale, coordinadora de la Dirección General de Escuelas.
 
Un funcionario de Chávez, ovacionado
Durante su discurso, por momentos hilvana anécdotas que refuerzan las ideas que expone. Héctor Soto (41) es el viceministro de Cultura y Desarrollo Humano de Venezuela. Su disertación generó aplausos y ovaciones entre los estudiantes y asistentes que ayer concurrieron al acto de apertura del 2º Congreso Latinoamericano de Educación Superior.
Acompaña a Hugo Chávez, presidente de Venezuela, desde que dio forma a la República Bolivariana de Venezuela. Y comparte cada una de sus ideas, especialmente las relacionadas con la educación. “Hay que construir un conocimiento integrado con la sociedad. La universidad y la comunidad no pueden estar separadas”, afirma.
Es duro cuando ataca la estructura anterior de formación superior. “No podemos seguir formando profesionales competidores e individualistas. Latinoamérica necesita ciudadanos transformadores y colectivistas”, agrega cuando se refiere a la formación terciaria.
Soto está al frente del Ministerio de Cultura y Desarrollo Humano que impulsó en Venezuela la creación de la Universidad Simón Rodríguez. Esa casa de estudios puso en marcha hace dos años la Misión Sucre, que ya tiene 24 mil estudiantes en todo el territorio venezolano y que apunta a que los ciudadanos recuperen su identidad y su cultura y que la universidad se relacione con la comunidad en la que se inserta.
“La misión es la universidad hecha pueblo. Los alumnos se reúnen una vez por semana, durante ocho horas intensivas y guiados por un tutor”, cuenta. Y agrega que “una de las actividades más importantes que realizan es hacer un relevamiento del patrimonio histórico y de las historias que guarda cada lugar”.
Acerca de la posibilidad de lograr una reforma universitaria latinoamericana, Soto cree que está en vías de hacerse, aunque es un camino lento.
En ese sentido, el funcionario afirma que “hay una iniciativa de la Argentina para realizar intercambios docentes. Vendrían profesores venezolanos, distribuidos en todo el territorio y viceversa”. Y concluye: “Es una manera de comenzar con la integración”.
Analía Boggia aboggia@losandes.com.ar