La biblioteca se ubica en el ex local de la escuela María Cali, que ha sido remozado a ese efecto por la comuna.
Cabe recordar que fue apadrinada por la Facultad de Filosofía y Letras de la UNC.
Además de los donativos que acercaron los padrinos de la flamante institución, también aportaron ejemplares la Dirección General de Escuelas; el Sindicato del Personal de Micros y Ómnibus de Mendoza, la biblioteca popular José Adriano Pujadas y pobladores de la zona.
Los vecinos manifestaron que era un gran alivio contar con un lugar donde los chicos tengan la posibilidad de encontrar el material necesario para estudiar, ya que antes tenían que trasladarse 10 kilómetros para llegar a la villa cabecera.
Pablo Tornello, funcionario municipal, destacó que la entidad abierta será una herramienta fundamental para el desarrollo de los jóvenes del lugar.