Las encuestas realizadas a 461 jóvenes de diferentes carreras de esa institución arrojaron varios resultados, entre ellos que el 97 por ciento de los estudiantes encontró un trabajo vinculado con su profesión. Sin embargo también indica que el 52, 2% cobra salarios inferiores a 750 pesos -ingreso promedio mensual de los últimos dos años-.
“Al preguntarles si las tareas que realizaban en su trabajo estaban relacionadas con su carrera, ellos afirmaron que sí tenían que ver”, contó Estela Zalba, secretaria académica del rectorado.
Los resultados no estarían tan alejados de otras perspectivas. Para Claudia Erice, titular de la consultora Anses, aproximadamente 82% de los egresados está haciendo algo vinculado con lo que estudió.
Lo cierto es que desde la Universidad también atribuyen el alto grado de inserción laboral a la oferta educativa, que produjo la transformación de la Ley Federal y los CBC. Así, muchos egresados ven en el campo de la educación un espacio para trabajar, aunque no tengan una formación docente: “Esto llevó a la UNCuyo a plantearse la necesidad de abrir los ciclos de profesorados para completar esa formación”, explicó Zalba.
Por eso, los lugares en los que se desempeñan los graduados tocan tanto las órbitas privadas como las públicas. Y varios trabajan en más de dos sitios a la vez.
Sueldos bajos
En cuanto a las remuneraciones, la explicación de la UNCuyo es que los montos se ajustan a los puestos que cubren los graduados: “Esto es un problema del mercado laboral. La mayoría son jóvenes y se desempeñan en cargos iniciales y no en los gerenciales”, deslizó Zalba.
Por su parte, las consultoras sostienen que ninguna empresa que les pide graduados, ofrece salarios menores a 1.000 pesos mensuales.
Según indicó Luis Piazza, director de la región Cuyo de la consultora Adecco, el hecho de que algunos jóvenes ganen poco se debe a que no hay un sinceramiento de las empresas con respecto a la profesión. Lo que significa que muchos realizan trabajos y cumplen horarios no acordes con los salarios que se les paga.
Aunque hay que señalar que existen carreras mejor remuneradas que otras. Es el caso de las ingenierías -civiles e industriales- que, analizadas individualmente en el informe de la UNCuyo, sobresalen con sueldos que superan los mil pesos.
A esto se suma la apreciación de las consultoras, que afirman que después de las ingenierías, las más pedidas y también bien pagadas son las derivadas de Ciencias Económicas: contadores y administradores de empresas.
Pese a estas referencias, Agostina P. (26) no ha tenido buena suerte desde que se graduó como administradora de empresas en 2002, en la UNCuyo. La joven está trabajando como secretaria. Y confiesa que vive buscando algo para hacer que se ajuste a sus estudios universitarios: “Es complicado, en todos lados me piden experiencia en cargos jerárquicos y yo recién me recibo. Si no te dan la posibilidad de empezar y capacitarte no podés llegar a ninguna parte”, señaló.
Los estudios de la UNCuyo también revelan que el 40%de los graduados trabaja en forma independiente y el 48% en relación de dependencia -sueldo estable, aportes, obras sociales y otros beneficios-, mientras que el resto se reparte entre contratados, ad honorem, en negro y becarios.
Esta realidad está directamente ligada con las carreras que se elige estudiar. “Hay profesiones “que no te habilitan para hacer trabajos independientes. Por ejemplo, un ingeniero en petróleo indefectiblemente tiene que desempeñarse dentro de una empresa”, indicó Zalba, sobre las limitaciones que presentan algunas carreras.
Ahora quieren determinar qué necesita el mercado
El programa “Seguimiento de la inserción laboral y el desempeño profesional de los graduados” se realizó durante 2003 y 2004. El objetivo era indagar la articulación de los graduados -de distintas carreras de la Universidad- con su trabajo profesional. Y también analizar de qué manera se corresponde la formación académica con los requerimientos y perfiles exigidos en el campo del trabajo.
Seleccionaron 24 carreras de las 11 Facultades. La muestra incluyó a 461 egresados -261 mujeres y 200 varones-, pertenecientes a las cohortes de 1998 hasta 2001.
Este año se instrumentó la segunda etapa, que finalizará el año próximo. En esta oportunidad, en vez de analizar el desempeño y la inserción desde la perspectiva del graduado pretenden indagar más en el campo laboral para ver qué se necesita, según explicó la secretaria académica del Rectorado, Estela Zalba.
Virginia Di Bari vdibari@losandes.com.ar
Los Andes: La mayoría de los graduados consigue un trabajo afín a su título, pero con sueldos bajos
Con título bajo el brazo, los jóvenes se lanzan en busca de una ocupación que se ajuste a sus conocimientos universitarios. Para conocer más de cerca la realidad que les toca vivir a los egresados, la Universidad Nacional de Cuyo realizó un seguimiento de la inserción laboral y el desempeño profesional de sus graduados. Según los datos, la mayoría consigue empleo, aunque no con las mejores condiciones.