Por primera vez en Mendoza se presentará la puesta en escena de la ópera “La vida breve”, de Manuel de Falla, a cargo de un numeroso y calificado elenco de solistas, bailarines y coreutas que actuarán junto a la Orquesta Sinfónica de la UNCuyo, conformando una reunión de casi 150 artistas en escena.
En la segunda parte, se repondrá -luego de varios años- uno de los más brillantes ballets del siglo XX: “El sombrero de tres picos”, también de Manuel de Falla, junto al Ballet Español “La Coruña” que dirige Cristina García de Kotlik y la participación de bailarines invitados.
 
Las entradas
La entrada general es gratuita. Se deben retirar con antelación en la delegación de OSDE Mendoza (Belgrano 827, Tel.4491020-21) y en el teatro Universidad (Lavalle 77, Tel. 4204548-49-50).
 
El sombrero de tres picos
El verano de 1916, uno de los años más negros del siglo XX, tuvo lugar un hecho capital para la historia de la música española: la visita de los Ballets Rusos de Diaghilev a Madrid. Allí el genial empresario ruso pudo disfrutar de un poco de paz en medio de la sangría europea, y de paso reencontrarse con su viejo conocido de París, ahora convertido en músico célebre, Manuel de Falla. Diaghilev aprovechó este encuentro para proponerle realizar un ballet con una de sus partituras. De Falla le habló entonces de un viejo proyecto sobre la pequeña novela “El sombrero de tres picos”, de Pedro Antonio de Alarcón (1833-1891), escrita en 1874, que llevaba acariciando desde hacía más de una década y de la que ya existía una adaptación operística de Hugo Wolf.
Diaghilev lo consideró una idea estupenda y decidió esperar a que el ballet estuviese terminado para incluirla dentro de sus giras. Pero, impacientado, insistió con que también cabía la posibilidad de llevar a escena las “Noches en los jardines de España”. La sensualidad que la partitura le sugería le hizo imaginar una fiesta nocturna en los patios de la Alhambra como escenario principal, donde bravíos gitanos cortejaban a muchachas rebosantes de pasión. De Falla, que era un católico devoto y se mantuvo toda su vida célibe, alejado de esas cuestiones, se negó, horrorizado. No había compuesto su obra para convertirla en un espectáculo vulgar e impropio de quien había puesto en escena “La consagración de la primavera”. Ante este argumento, Diaghilev quedó convencido de que debía esperar a que “El corregidor y la molinera” , cuyo libreto firmaba Gregorio Martínez Sierra, estuviese terminado.
La obra: Tras el estreno, De Falla escribió dos suites para orquesta, suprimiendo escenas descriptivas y varios momentos con intervención vocal femenina. Desde entonces, la versión original permaneció olvidada, hasta que fue grabada en 1961 por Ernest Ansermet, director de la premier mundial, con Teresa Berganza.
 
La vida breve
Opera en dos actos, con música de Manuel de Falla (1876 - 1946) y libreto de Carlos Fernández Shaw. Con esta obra Manuel de Falla ganó el concurso de la Academia de Bellas Artes de Madrid en 1905. Su estreno, tras numerosas vicisitudes, tuvo lugar el 1° de abril de 1913 en Niza, cantada en francés.
La acción se desarrolla en Granada a principios del siglo XX.