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Los Andes: Los mejores alumnos de Medicina viajan a Suecia para perfeccionarse

Alejandra Daruich y Ezequiel Petra desde chicos tenían un sueño: ayudar a la gente a sanar de sus enfermedades. Ella siempre acompañó a su papá, que también es médico, al consultorio. Él compartió junto a su hermana, ahora médica, esa intención de ejercer el día de mañana una vocación de servicio por la gente.

24 de agosto de 2005, 14:09.

Hoy Ezequiel tiene 24 años y es abanderado nacional de su facultad. Alejandra tiene 22 años y porta la bandera provincial. Ambos estudiaron en la Universidad Nacional de Cuyo, son los dos mejores promedios de la carrera de Medicina y el domingo próximo viajarán a Suecia, como únicos representantes de nuestro país, luego de haber ganado una beca para terminar sus prácticas profesionales en el Instituto Karolinska, un hospital escuela de Estocolmo, en el que se eligen todos los años los postulantes a los premios Nobel.
Para obtener esta beca, ambos tuvieron que presentar un currículum en que se tuvo en cuenta el promedio general de la carrera, el conocimiento de idiomas, las investigaciones y cursos realizados y la docencia ejercida. Luego, tuvieron que sortear una entrevista en inglés y a partir de ese momento quedaron seleccionados para, según ellos, “una oportunidad maravillosa, tanto profesional como humana”.
Ellos son amigos y comparten la idea ferviente del servicio a la comunidad, pero luego del viaje a Suecia tienen pensado optar por especialidades diferentes. “Yo estoy decidida y voy a hacer la residencia en Ginecología y Obstetricia, y ya estoy vinculada con un proyecto de investigación sobre el cáncer de ovarios”, aseguró Alejandra, una de las chicas récord de la Facultad de Medicina, por haberse recibido a los 22 años.
Por su parte, Ezequiel aseguró: “Estoy dudando entre inclinarme por Hemodinamia o Hematología, lo que sí sé es que me gustaría hacer docencia”.
En cuanto a su futuro laboral, los dos jóvenes coinciden en que prefieren desarrollar su actividad en el país, antes que emigrar al exterior como han hecho muchos profesionales argentinos que terminan siendo más reconocidos afuera que en su propio país.
“Nosotros estudiamos en una universidad estatal, por eso nos gustaría devolverle todo ese apoyo a la gente de Mendoza, lo sentimos como una obligación moral el quedarnos en la provincia. Además pienso que se puede resignar una mejora económica para aportar un granito de arena para que el país salga adelante”, expresó Petra, que cursó su secundaria en el Liceo Agrícola y asegura que en un futuro no muy lejano le gustaría ser licenciado en enología.
Con respecto al sentimiento de pertenencia que los chicos expresan con su país y su provincia. “Ejercer mi profesión acá significa compartir esta vocación con la gente que quiero”, resumió Daruich, que nació en San Martín y fue al colegio Nuestra Señora del Líbano.
Como todos los jóvenes, Alejandra y Ezequiel tienen sueños, ambos comentaron cuáles son esos anhelos en lo que respecta a su futura profesión y en lo que tiene que ver con su vida particular. “Más allá de los logros que vaya adquiriendo a nivel profesional, sueño con ser mamá y formar una familia”, sentenció ella. Él coincidió con su compañera, en cuanto a formar una familia, y le agregó el deseo de “ser útil a la sociedad, por medio de la docencia y la investigación clínica que tiene que ver más con la parte humana del paciente”.
Alejandra y Ezequiel tuvieron que dejar de lado muchas de las actividades recreativas características de su juventud para sentarse a incorporar los conocimientos que les permitieron, por ejemplo, obtener la beca de Suecia. Por eso ellos siempre agradecen el “aguante” de su familia, sus amigos y la facultad. Tanto esfuerzo parece que no fue en vano: cuando hablan de su profesión lo hacen con pasión, en sus rostros se advierte las ganas de triunfar y de plasmar sus conocimientos en su comunidad.
 
En detalle
Alejandra Daruich. Tiene 22 años y es una de las estudiantes que más joven se recibió en la historia de la Facultad de Medicina de la UN Cuyo. Su promedio académico es de 9, 26 y es la actual abanderada provincial de su carrera. Su padre también es médico.
Ezequiel Petra. Tiene 24 años y es el primer promedio de su carrera con 9, 42. Porta la Bandera nacional en su facultad y comparte la pasión de la medicina con su hermana que ya se recibió. También quiere ser licenciado en enología.
 
Práctica intensa
El Instituto Karolinska está situado en la ciudad de Estocolmo, Suecia, y todos los años recibe a 150 alumnos para el internado de medicina, que llegan de todos los rincones del planeta. El hospital escuela alberga en un campus a los estudiantes por cinco meses y sus alumnos parten a las distintas universidades con las que tienen convenio para realizar la misma tarea de preparación para la vida profesional.
Allí, los mendocinos Ezequiel Petra y Alejandra Daruich realizarán lo que se denomina ”rotación clínica quirúrgica” y en entre las especialidades en que recibirán conocimientos se encuentran: radiología, traumatología y anestesiología. Esta experiencia se repite todos los años y desde el Instituto Karolinska tienen en cuenta que los alumnos sepan inglés y practiquen deportes.
Leandro Sturniolo lsturniolo@losandes.com.ar

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