El concepto central es que el paciente reciba la mejor atención posible. Así, el futuro edificio concentrará todas las áreas referidas a la patología, y los niños y sus familias podrán recibir un tratamiento coordinado en un mismo sitio. Además de potenciar la disponibilidad de camas, se avanzará en estudios científicos y análisis específicos que actualmente deben derivarse a Buenos Aires. Esto ocurre en Biología molecular y Citogenética.
La Unidad Hemato Oncológica ya está plasmada en un pre proyecto arquitectónico. Será construida hacia el sector oeste del Notti y detrás de la casa Ronald McDonald's, en terrenos que pertenecen al mismo hospital. Todavía no se ha fijado el plazo de inicio de obra, pues se hará una vez asegurado el financiamiento.
Desde la ONG Fundavita -que impulsa el proyecto- Eduardo Terranova estimó que requerirán una inversión superior a los 3 millones de pesos. “Después de obtener el consenso de todos los organismos, vamos a trabajar en la política de recaudación de dinero. Es un emprendimiento mixto, tanto la construcción como el mantenimiento se sostendrán con aportes públicos y privados”, acotó.
Por su parte, el ministro de Salud, Armando Caletti, adelantó que el Gobierno está dispuesto a apoyar la inciativa, aunque no consignó con qué porcentaje presupuestario.
La iniciativa surgió de Fundavita hace más de tres años y se paralizó debido a la debacle económica del país. Ahora, junto a la fundación y el hospital, trabajan la facultad de Ciencias Médicas de la UNCuyo, el Gobierno provincial y la Universidad de Miami.
El primer paso hacia la concreción del centro de alta complejidad se dio esta semana, con la visita de dos especialistas del Jackson Memorial Hospital de la Universidad de Miami. Daniel Amstrong y Stuart Toledano recorrieron las instalaciones y corroboraron la viabilidad del proyecto. El próximo punto será firmar un convenio con la entidad estadounidense para establecer una vía de intercambio y asesoramiento permanente.
“Está comenzando un proceso de cambio en los avances científicos sobre cáncer que se extenderá por 10 años. La ventaja es que ustedes podrán diseñar la infraestructura y el equipamiento en línea con estos avances”, dijo Daniel Amstrong.
En este momento, el hospital pediátrico absorbe la totalidad de la demanda (hay pequeños derivados de San Luis, San Juan, La Pampa y Neuquén) y el 25 ó 30 por ciento de la actividad hospitalaria está representada por pacientes oncohematológicos.
“Con este proyecto podríamos absorber mucho más y sumaríamos equipamiento, recursos humanos y la posibilidad de capacitarse en Miami”, señaló la directora del nosocomio, María Trípoli. La doctora dijo que el hospital tiene instalado el 80% de un laboratorio de biología molecular, que ahora podrá ponerse en marcha. Su objetivo más ambicioso consiste en realizar trasplantes de médula ósea en Mendoza.
Un pediatra del equipo, Gonzalo Nalda, destacó que superarán los inconvenientes actuales generados por tener a los pacientes en distintas instalaciones, aunque la futura unidad estará vinculada al cuerpo central; compartirá salas de quirófano, terapia intensiva y de diagnóstico por imágenes. La UNCuyo pondrá a disposición del centro su laboratorio de biología molecular y el instituto de genética.
Una moderna unidad hema oncológica
No hay plazos de obra, primero se articulará lo científico y médico.
Inversión. Requiere más de $3 millones (aporte privado-público).
Obra. Se construirá un ala nueva en el Notti, hacia el sector oeste. Tendrá tres pisos y una superficie cubierta de 1.383 metros.
Equipamiento. De alta tecnología. Avanzará en lo que hoy falta: biología molecular, citogenpética y estudios científicos.
Instalaciones. Tendrá consultorios, habitaciones (20 camas), sala de juegos, áreas de pasantías, etc.
