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Los Andes: Un congreso impulsa la equitación como terapia

“Buscando alternativas para mejorar la calidad de vida de mi hija de 19 años pensé en recurrir a la equinoterapia. Ella tiene una falla genética en el quinto cromosoma que le provoca inmadurez. Cuando los médicos me autorizaron, comenzó el tratamiento con los caballos y desde ese momento los beneficios fueron inmediatos”. Así expresó Mabel Jofré su alegría por haber encontrado un método para sobrellevar la enfermedad de Vanesa.

Aunque en Mendoza hace pocos años que se instaló la equinoterapia como una veta para tratar problemas físicos y psicológicos, ya hay países -como Cuba, Brasil y algunos europeos- que cuentan con una larga trayectoria y regulación en el tema.
 
Por eso se decidió realizar el “Primer Congreso Mendocino de Equinoterapia”. El objetivo del encuentro es difundir los beneficios de la terapia con los caballos y unir a diferentes actores y profesionales, tanto de organizaciones estatales como no gubernamentales, para consensuar puntos y luchar por una reglamentación de la materia.
 
Hasta el momento esta actividad es percibida sólo como una terapia alternativa y no existe un trabajo coordinado entre los hospitales y los centros de equinoterapia que existen en Mendoza.
 
“Queremos involucrar a todas las personas que están en el tema para planificar criterios y fomentar la actividad y, de este modo, lograr que sea reconocida por las obras sociales”, señaló Alberto Stornini, presidente de la Fundación de equinoterapia San Roque.
 
Según indicó Francisca Montaño, médica pediatra, el hecho de recuperar a un paciente es productivo para el Estado. “Hay que pensar que lo que éste se gasta en pagar una obra social después lo recupera. A la larga ahorra, porque te encontrás con una persona contenida y que ha mejorado su calidad de vida”.
 
Los beneficios
 
Los especialistas explicaron que el método de la equinoterapia es válido para aquellas personas que se encuentran en procesos de rehabilitación, terapia, recreación o deporte, cualquiera sea sea la edad que tenga.
 
“A través de su marcha, el caballo transmite una serie de impulsos que el hombre recibe, y que viajan a través de la médula hacia el cerebro. Eso estimula cualquier parte dormida del cuerpo, articulaciones y músculos”, dijo Edwin Cáceres, profesor de educación física.
 
Así, los resultados son rápidos y por eso la importancia de trabajar con equipos interdisciplinarios. “También el fin del congreso es capacitar a los profesionales para que deriven a los centros de equinoterapia, vean como evoluciona el paciente y diagnostique si es efectivo o no”, contó Montaño.
 
El congreso se está desarrollando en la la Facultad de Odontología de la UNCuyo y termina mañana. Asisten especialistas de Argentina y países vecinos.
Virginia di Bari - vdibari@losandes.com.ar

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