Fue una tarde ocupada para la escritora María Kodama. Llegó a la Facultad de Derecho de la UNCuyo para participar de la presentación, junto al abogado Daniel Roque Vítolo, de la reciente publicación “Borges y la criminología”, de Alejandro Poquet. El libro analiza los poemas, ensayos y cuentos que retratan la violencia del hombre y el Estado, con la cárcel como arquetipo de laberinto, en la obra del erudito escritor argentino.
Antes mantuvo una reunión distendida con el vicerrector Jorge Barón; el decano de la Facultad de Derecho, Fernando Pérez Lasala; el presidente de la Suprema Corte de Justicia, Jorge Nanclares; el procurador de la Corte Alejandro Gullé; la defensora General del Poder Judicial, Mariana Silvestri; el intendente de la Ciudad de Mendoza, Rodolfo Suarez y la secretaria de Cultura, Turismo y Desarrollo Económico de la Ciudad, Mariana Juri. Durante el encuentro se recordó que el primer Doctorado Honoris Causa que recibió Jorge Luis Borges, se lo otorgó la Universidad Nacional de Cuyo en 1956.
Durante su visita a la Facultad de Derecho Kodama se refirió al lenguaje literario de la obra de Alejandro Poquet y de la utilización que se hace de la obra de Borges para abordar otras disciplinas; como por ejemplo el Derecho Penal. Señaló que es muy frecuente que Borges despierte en la gente cosas que quizás no pertenecían a su obra pero dijo que eso no es importante. “La gente vuelca sobre la obra de Borges los intereses que ellos tienen porque hace a la variedad y a la riqueza del mundo. Eso es lo que lo hace interesante, que den sus opiniones; si no, qué aburrido sería si todos pensáramos lo mismo”, sostuvo.
Respecto de la distinción que recibió del intendente Suarez, Kodama señaló que era doblemente emocionante ya que le hizo recordar que fue la misma UNCuyo, la que distinguió a Borges con su máximo reconocimiento. “Estoy emocionada al pensar que él también estuvo acá y eso es muy lindo y les agradezco muchísimo la deferencia que han tenido”,cerró.
El autor del libro que se presentó, Alejandro Poquet, se refirió a su publicación y dijo que es un intento de juntar la obra de Borges y su relación con el Derecho Penal y la Criminología; el crimen y la cárcel pero también las instituciones que tienen que ver con lo punitivo como la justicia, la policía. “Borges en toda su obra da pincelazos y yo los tomé para reconstruir un pensamiento criminológico. Dijo además que la presencia de tanta gente, el vicerrector de la Universidad, fue una experiencia inesperada y emotiva.
El vicerrector de la UNCuyo, Jorge Barón, cerró la presentación y señaló que la obra le pareció maravillosa y que hace un aporte fundamental. “Trata temas profundamente conflictivos desde un costado humano, desde una visión filosófica” dijo y “que María Kodama esté con nosotros en la Universidad es un gesto maravilloso que ha tenido y todas las autoridades que participaron del acto hablan del mérito que tiene este libro que se presentó hoy”, concluyó.
El libro
De la Editorial Olejnik, el libro pertenece al doctor en Derecho de la facultad de Derecho de la UNCuyo, Alejandro Poquet, quien descubre un Borges inédito a través de una lectura criminológica de su obra.
Desde el margen del Río de la Plata, Jorge Luis Borges piensa criminológicamente, confronta con el positivismo de Sherlock Holmes, y se adelanta a cuestionamientos que luego serán formulados por corrientes criminológicas críticas de países centrales. La “cuestión criminal” en esta literatura es materia de indagaciones éticas, filosóficas, metafísicas, sociales y políticas.
Estas indagaciones problematizan las categorías bien y mal, orden y desorden, con lo cual sorprenden al sentido común punitivo y a la opinión publicada. Esta relectura del notable escritor argentino conduce a Poquet a develar una ciencia jurídico penal y un saber criminológico basados por jactancia realista, funcional a políticas criminales dirigidas contra un enemigo por esencia diferente al ciudadano amigo.