A partir de hoy los estudiantes de todas las carreras musicales de la Universidad tendrán acceso a una formación musical de mejor calidad gracias al nuevo edificio que está diseñado para conseguir  procesos excelencia académica con la acústica y sonoridad necesaria para enseñar y aprender los diferentes instrumentos. La primera etapa de la nueva Escuela que ya se inauguró albergará el 75% de las cátedras ya que sus aulas están organizadas por familias de instrumentos para evitar las interferencias sonoras y la reverberancia. 

Durante la inauguración la decana de la Facultad de Artes y Diseño, Silvia Persio, agradeció detalladamente a autoridades, personal docente y de apoyo académico así como a sus antecesores la concreción del nuevo edificio para la Escuela de Música. La académica destacó también el esfuerzo como uno de los valores que prevalecieron para conseguir realizar el sueño del flamante edificio. En esa misma dirección consideró que aquellos “que trabajamos y nos graduamos en la Universidad Nacional de Cuyo somos argentinos privilegiados”.

El rector Arturo Somoza por su parte resaltó la continuidad institucional que permitió un esfuerzo continuo “que recoge los deseos y esperanzas de décadas de formación musical”, expresó. Además se refirió a la responsabilidad que le cabe a la UNCuyo como receptora de los aportes y esfuerzo de la sociedad que la sostiene. En ese sentido Somoza dijo que  la Universidad se debe a la sociedad. “Acá no hay análisis de rentabilidad, hay una fuerte inversión social”, sostuvo. El Rector ratificó el compromiso de la Casa de Altos Estudios para seguir invirtiendo en el arte y la cultura y agradeció a los decanos del resto de las facultades el apoyo para estas disciplinas al tiempo que reconoció que ese apoyo suponía relegar otras inversiones que también son necesarias.

La nueva construcción del campus universitario lleva el nombre de Julio Perceval, quien fue director y organizador del Conservatorio de Música de la UNCuyo, y un destacado compositor argentino. Durante el acto de inauguración su viuda y nieta descubrieron, junto a las autoridades universitarias, una placa que bautizó al edificio.  

El proyecto arquitectónico de toda la obra ya ganó el reconocimiento de la Red Edificar  de Mendoza que este año le otorgó un premio como obra institucional. Se valoró especialmente el realce de los valores arquitectónicos y urbanísticos, la relación de la obra con su entorno, el buen uso de los materiales y la adopción de tecnologías apropiadas. Un detalle para destacar es su construcción con bloques de hormigón rellenos de arena para conseguir una mejor aislación acústica. Por esta obra de arquitectura recibieron el premio Daniel Gelardi, Gustavo Barea, Federico Sampieri, Federico Inschauspe, Emilio Gunini y Jimena Gómez.

Esta inauguración de la Escuela de Música coincide con el aniversario número 70 desde su creación como Conservatorio de Música y permitirá que todas las carreras de la Facultad de Artes y Diseño se concentren en el campus de la UNCuyo. Estos primeros 1.800 metros posibilitarán el funcionamiento de 29 aulas en las que se ubicarán las cátedras que corresponden a las materias vinculadas a la interpretación de los diferentes instrumentos.

La habilitación del nuevo edificio coincide con un récord de inscripciones en la Escuela de Música que este año asciende a  400 jóvenes que eligieron alguna de sus carreras con una matrícula total de aproximadamente 1.300 estudiantes.

La Universidad ya invirtió cerca de 4 millones de pesos en esta etapa de la obra que comenzó en septiembre de 2007 y que tendrá una infraestructura y equipamientos de última generación que posibilitarán un proceso de enseñanza aprendizaje con una acústica comparable a las escuelas del primer mundo. Restan otras dos etapas que cuando estén finalizadas sumarán 5.450 metros cuadrados.