Lo público y privado se articularon con el fin de reflexionar acerca de las profundas innovaciones científico-tecnológicas que generaron un nuevo escenario global. En ese sentido, se realizó un encuentro en la Universidad Champagnat, que reunió a los académicos Ernesto Ottone, Juan Gabriel Tokatlian y a quien fuera titular del ministerio de Relaciones Exteriores de la Nación, Jorge Taiana.
Cada uno tuvo a su cargo una conferencia vinculada a la temática. Ottone arrancó con la exposición ¿Es gobernable la globalización? a la que le siguió la disertación de Taiana “Democracia, Derechos Humanos y Globalización”. Cerró la actividad Tokatlian con el tema “Una mirada crítica sobre los asuntos globales contemporáneos"
Previo a las conferencias los rectores Arturo Somoza, de la UNCuyo, y Mónica González Gaviola, de la Universidad Champagnat, junto con José Octavio Bordón, director del Centro de Asuntos Globales de la UNCuyo (CEAG), resaltaron la labor conjunta que permitió realizar la actividad.
En relación con ello, Arturo Somoza valoró ese tipo de actitudes solidarias entre pares y consideró que deben incrementarse para trabajar por la Nación y la Integración Latinoamericana. “Esta posibilidad es una expresión de lo que es el sistema universitario argentino, reconocido constitucionalmente en su autonomía y establecido como sistema dual por su ley de Educación Superior”, dijo.
Continuando con esa línea definió este sistema como un modelo en historia y en presente para toda Latinoamérica, por la gratuidad de la enseñanza, por el crecimiento y expansión, que ha tenido en los últimos años y, por la convivencia del sistema público y privado.
El ingeniero agrónomo señaló que esa relación (público-privado) se inscribe en la lógica y pensamiento de colaboración y de complementación de los sistemas de las distintas academias que componen dicho sistema y que a su vez se encuentran en el consejo de universidades para ser asesores de criterios de Educación Superior.
Describió a esa articulación como la forma de gestionar que el sistema universitario consagró en Cartagena de Indias en el 2008, es decir, que entendió a la Educación Superior como bien público y social, como derecho humano y universal, y obligación del estado.
Por su parte, José Octavio Bordón del CEAG, definió al Centro como una respuesta de la Universidad y de lo que “queremos” que sea un trabajo conjunto de la Provincia, “para afrontar con realismo y valores los desafíos de las profundas innovaciones científico-tecnológicas, de la última parte del siglo XX, que generaron un nuevo escenario”.
Detalló que ese nuevo escenario es más que una transición, ya que aparecen connotados una cantidad de elementos -de lo que se denomina sociedad del conocimiento, sociedad de la información, y globalización- que suponen riesgos, oportunidades y desafíos. Y en ese contexto “es fundamental la articulación del pensamiento, la acción y las políticas públicas”, resaltó.
Bordón manifestó que los procesos globales no pueden verse y analizarse desde una sola perspectiva sino a través de una visión holística. “Los temas globales no pueden ser tratados y analizados desde los centros más desarrollados o más poderosos del mundo, sino también en cada rincón del país. No sólo para debatirlos sino para incorporar la mirada y la reflexión de nuestra gente”, pronunció.
La rectora de la Universidad Champagnat, Mónica González Gaviola, describió al encuentro como “prácticas de colaboración que implican aprendizajes vitales para movernos de manera ética y eficiente en el nuevo mundo global de la sociedad del conocimiento”.
En esa instancia, resaltó el tema de la formación profesional y espiritual de los estudiantes y sobre eso mencionó que una positiva y exitosa inserción en la sociedad es el objetivo principal que comparten ambas instituciones. “La revolución de expectativas –que se traduce en la expansión formidable de los alumnos por todo el mundo- acompaña los desafíos de la globalización tecnológica y productiva de la Sociedad del Conocimiento y reorientan los escenarios de trabajo de las universidades”, puntualizó.
En ese sentido, concluyó que las competencias que deben adquirir los universitarios requieren de una compleja construcción de habilidades cognitivas, actitudinales, psicológicas y éticas, como compartir fuentes, producir colaborativamente y promover el libre acceso a la información y el saber.