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Mujeres y Revolución: el Idegem aporta una mirada más amplia y crítica

En conmemoración a los 210 años del 25 de Mayo de 1810, la historiadora María Gabriela Vásquez indaga en el rol de las mujeres durante este proceso histórico. Propone, entre otras perspectivas, considerar la heterogeneidad entre ellas y que hay imágenes "romantizadas" en torno a las más reconocidas por la historiografía.

imagen Mujeres y Revolución: el Idegem aporta una mirada más amplia y crítica

Que hubo mujeres, con nombres que se conocen y otros que no, que fueron idealistas y protagonizaron la Revolución de Mayo y la Guerra y la Declaración de la Independencia, teniendo un rol fundamental en la búsqueda de la libertad y la igualdad con respecto a los varones, es parte de la mirada más amplia y crítica que proponen desde el Instituto de Estudios de Género y Mujeres (Idegem) de la UNCUYO en un nuevo aniversario conmemorativo al 25 de Mayo de 1810. La especialista en “Historia de las mujeres” María Gabriela Vázquez, docente de la Facultad de Filosofía y Letras e integrante de este Instituto multidisciplinario que pertenece a la secretaría de Extensión y Vinculación de la Universidad, esboza algunos puntos necesarios para repensar este proceso histórico.

“Imágenes romantizadas” y nombres reconocidos

Entre otras mujeres que se dedicaron a la acción política, social y urbana durante los inicios del siglo XIX, Vásquez cita el nombre de Mariquita Sánchez de Thompson, sobre quien afirma que hay “imágenes romantizadas”. En el caso de esta mujer, cuya imagen evoca la historiografía tradicional para hablar de su casa, lugar en el que se cantó el Himno Nacional por primera vez, la historiadora comenta: “fue un personaje muy importante, no solamente porque en su casa se reunían, tomaban mate, comían pastelitos y también se cantaba el Himno. Era un espacio político, donde tanto mujeres como varones estaban discutiendo temas teóricos, temas políticos, temas ideológicos. Es decir, se estaba debatiendo qué es lo que iba a ocurrir y cómo se iba a llevar adelante todo el proceso revolucionario. Entonces, no es un lugar en donde exclusivamente se tomaban mates y se comían pastelitos. Verdaderamente, ahí sí se cocinaba la revolución”.

Heterogeneidad y contexto histórico

Lejos de la idea de una única imagen, Vásquez establece que los grupos de mujeres que fueron parte de estos procesos históricos fueron sumamente heterogéneos. Y que hubo también aquellas que “iban a la acción”, entendiéndose como activas en el campo de batalla, entre ellas la reconocida Juana Azurduy. Sin embargo, la especialista expresa que hacia 1810 muchas ya tenían “una suerte de preparación en la participación contra ejércitos”.

“Pensemos en las Invasiones Inglesas de 1806 y 1807, donde algunas mujeres de la Ciudad de Buenos Aires, también de distintos sectores sociales, de distintas etnias, van a participar para expulsar a los ingleses del territorio. Es decir que esto va a ser como un «bautismo de fuego» para algunas mujeres, porque después las vamos a tener como partícipes en el Ejército del Norte bajo el mando de Belgrano. Pienso, por ejemplo, en la que ha sido llamada Madre de la Patria, que es Remedios del Valle”, destaca.  

La historiadora de la UNCUYO observa, además, que para entender la historia de las mujeres en su heterogeneidad y en el contexto histórico de la Revolución de Mayo y de la Independencia, también es necesario considerar y profundizar en la idea de que hubo muchas de ellas que seguían siendo fieles a la Corona Española. Refiriéndose a este punto, Vázquez señala: “en muchos matrimonios la mujer o el varón estaba a favor de la Revolución y de la Independencia, y el otro cónyuge estaba a favor de España. Entonces, esto va a producir también choques, divisiones y separaciones. Y otro tema tampoco muy desarrollado es qué pasaba con las mujeres, con las mujeres que estaban en contra de los revolucionarios, en contra de nuestros héroes, como San Martín, por ejemplo. También había mujeres que se oponían al Plan Libertador acá, en Mendoza, y muchas de ellas van a ser encarceladas. Y como no había cárceles para mujeres en esa época, se las llevaba a conventos”.

A grandes rasgos, y considerando que los roles de las mujeres en la historia del Virreinato del Río de la Plata durante el siglo XIX, fueron variados, desde el Idegem destacan para este nuevo aniversario la necesidad, a la hora de estudiar historia de las mujeres, de dejar de lado la perspectiva de la esposa, la madre, la que debía permanecer en casa. “Sólo así se puede llegar a una visión amplia de la heterogeneidad de mujeres que hubo tanto en esa como en cualquier otra época histórica”, remarcan.

 

 

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