Saltar a contenido principal Saltar a navegación principal

Nicaragua: Latinoamerica reclama

Varios miles de manifestantes se apostaron en las inmediaciones de casa presidencial, abuchearon y tiraron piedras al presidente Enrique Bolaño.

Más que un derecho de ciudadano en todo país democrático, hoy la manifestación cumple un rol importantísimo en las repúblicas de Latinoamérica.

Hace tiempo vivimos en Argentina ´los “cacerolazos” que junto a otras manifestaciones populares derrocó a un presidente. Hace unos días el pueblo de Ecuador se agolpó ante la casa de gobierno y hasta la renuncia de Gutiérrez no cesó “el bocinazo”.

Hoy grita Nicaragua a través de estudiantes, pobladores de barriadas marginales y autobuseros, que se unieron en la marcha para reclamar una solución al problema de los combustibles que obligó a un incremento en las tarifas de los buses.

Bolaños, acompañado por miembros de su gabinete, fue atacado cuando salió a recibir en las inmediaciones de la presidencia a miles de manifestantes que le abuchearon, lanzaron piedras y dispararon al aire morteros artesanales, pero el mandatario fue protegido por policías antimotines y agentes.

En el incidente, uno de los hijos de Bolaños -Enrique Bolaños Abaunzas- resultó con una herida en la cabeza por una pedrada y fue sacado del lugar ensangrentado en una ambulancia, según constataron periodistas.

En una posterior rueda de prensa, Bolaños aseguró que no piensa renunciar a su cargo y anunció que ha instruido al Ministro de Defensa y al Ejército de Nicaragua a mantener permanente atención para contribuir a la tranquilidad y el orden nacional.

Por otro lado, el mandatario dijo que está dispuesto a un diálogo, pero que los manifestantes no lo desean. "¿Cómo podés hablar solito? Ellos no quieren diálogo, ellos no quiere solución; quieren crear caos, y crear crisis, porque en esas aguas putrefactas es donde a ellos les gusta nadar", dijo el presidente nicaragüense.

Sin embargo, el presidente fue enfático en que no bajará el precio del servicio de transportes, como lo demandan los estudiantes, porque los precios se rigen "por las leyes del mercado".

Mientras tanto, escuelas y colegios suspendieron sus clases, momentos en que la Policía aumentó la vigilanca en puntos estratégicos. Miles de ciudadanos tuvieron que caminar para llegar a sus trabajos, y otros optaron por quedarse en sus casas para evitar quedar atrapados en eventuales enfrentamientos. El Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (CENIDH) criticó la falta de respuesta del gobierno a los reclamos de población y la represión indiscriminada de parte de la Policía que ha lanzado bombas lacrimógenas cerca de los barrios.

Igualmente, la represión ya no causa miedo, al contrario, incentiva a los manifestantes y a toda la población a salir a las calles, espontáneamente o imovilizada por algunos sectores, en respaldo a la  lucha y en contra de la represión policial.

 Eva Reveco.

vireveco@yahoo.com.ar

Escenarios Latinoamericanos

Contenido relacionado