Tras conocerse el respaldo de la Cámara de Diputados de la Nación al veto del Poder Ejecutivo a la Ley de Financiamiento Universitario, la rectora de la Universidad Nacional de Cuyo, Esther Sanchez, ofreció una carta a la comunidad universitaria en particular y a la sociedad mendocina y argentina en general.
Hoy es un día de profunda tristeza para la Universidad pública argentina.
Intentamos, con fuerte apoyo de la sociedad y a través del Congreso, definir una metodología de actualización salarial y de gastos de funcionamiento que permita el normal desarrollo, con calidad, de las funciones de docencia, investigación, extensión y vinculación de la Universidad, sin que sea necesario a través de distintas acciones una permanente demanda de fondos.
Ahora debemos concentrarnos en mejorar el Presupuesto 2025 presentado por el Gobierno para Universidades, que representa el 53% de las necesidades reales del sistema universitario. Aquí nuestras legisladoras y legisladores vuelven a jugar un papel importante para defender el presupuesto necesario.
No hemos abandonado la lucha.
Seguiremos en la búsqueda de diálogo, un diálogo constructivo, honesto y -esperamos- sin agravios hasta que se logre disponer de los recursos necesarios para que las universidades cumplan el objetivo de formar ciudadanos transformadores de la realidad social.
Agradezco en estas circunstancias el compromiso incondicional de nuestro personal docente y no docente que día a día contribuye para que nuestros estudiantes se formen con calidad en cada una de las unidades académicas, escuelas e institutos de nuestra querida Universidad Nacional de Cuyo.
También agradezco el acompañamiento de nuestros estudiantes y graduados. Igualmente agradezco el esfuerzo de nuestra comunidad toda por trabajar en las transformaciones necesarias para nuestros estudiantes y para la sociedad según lo que ellas requieren. Por último, pongo en valor la valentía de nuestras y nuestros legisladores que apoyaron la Ley de Financiamiento Universitario.