Los ingresantes del Instituto recibirán capacitación virtual durante la preparación del examen de admisión. Las pruebas se tomarán el 4 de mayo y las clases comenzarán a fines de julio, en la ciudad de Bariloche.

Podrán rendir en Buenos Aires, Córdoba, Mendoza, Rosario, Tucumán y ​Bariloche. Y también en los consulados argentinos en el exterior. Los interesados en presentarse tienen la opción de anotarse, gratis, en la “Cátedra virtual de Matemática y Física General” del Instituto Balseiro desde donde recibirán tutoría.

“En este sitio web (http://oraculo.animusargentina.com/) ofrecemos apoyo a todos los estudiantes universitarios que quieran prepararse para rendir el examen de admisión de las carreras de grado del Instituto Balseiro, que son la Licenciatura en Física y las Ingenierías Mecánica, Nuclear y en Telecomunicaciones”, contó el vicedirector del Área de Ingeniería, Mariano Cantero. 

La modalidad del Instituto Balseiro es que los chicos ingresen a partir de tercer año, por lo que para inscribirse deben tener aprobadas materias de los dos primeros años en una carrera de ingeniería, física o afín, en una universidad.

Las inscripciones cierran el 20 de abril. Luego de aprobar el examen y presentarse a una entrevista personal, se anuncia quiénes quedaron seleccionados para ingresar al Instituto. La particularidad es que todos los estudiantes del Balseiro reciben becas completas de la CNEA. 

La iniciativa de la ayuda virtual para preparar el examen surgió hace 12 años. Docentes, que también son investigadores de distintos campos en el Centro Atómico Bariloche de la CNEA, son los que coordinan las actividades de la cátedra. Responden dudas sobre la teoría y la resolución de problemas, además de consultas generales sobre el examen y además se informan acerca de la vida del estudiante en el Instituto.

Ninguno de esos docentes forma parte de la Comisión de Ingreso. Es decir, no intervienen en el proceso de selección, ni comparten información con la Comisión. Así, los participantes de este espacio virtual son libres de preguntar lo que quieran sin ser evaluados. “Es un espacio para aprender física y matemática sin presiones”, definieron los docentes.