En la Argentina, 8 de cada 10 adopciones se producen mediante el método de entrega directa. Es un pacto directo entre la madre biológica y la adoptiva. Ambas se reúnen y entienden que por diversas razones personales, una le dará la vida y la otra, un hogar. Después del parto y representadas por un abogado, deben presentarse ante un juez, quien decide si el acuerdo es válido.
La adopción por entrega directa es un procedimiento legal, que se lleva a cabo en todo el territorio argentino. El país está dividido en dos: las provincias del norte y nordeste proveen los bebés, y las restantes son las receptoras de los mismos.
Cuando realizan el contacto con la madre embarazada, los padres adoptantes se inscriben en el juzgado correspondiente, expresando el deseo de formar una familia; presentan una carpeta que contiene certificados de sus aptitudes morales y materiales para probar al Estado que pueden hacerse cargo del bebé. Luego del nacimiento, se dirigen al juzgado con la madre biológica, en donde ella debe hablar con el juez y explicarle porque desea renunciar a la patria potestad de su hijo. Luego el juez aceptará o no el acuerdo entre las familias.
Los riesgos de este tipo de adopción es que la madre biológica puede cambiar de opinión a último momento o la existencia de familiares que pueden hacerse cargo del recién nacido. En la manera tradicional, primero se confirma si ella o algún miembro del grupo familiar no pueden criar al niño, se realiza los trámites de la renuncia de la patria potestad y recién entonces, el juez busca a la familia que mejor futuro le pueda dar al bebé.
En el país por año hay entre 4.000 y 6.000 parejas que inician el trámite de adopción con el sueño de formar o agrandar su familia. Pero el tiempo promedio de la adopción tradicional es de 4 años. La ventaja de la adopción por entrega directa es la reducción del tiempo.
Para erradicar este tipo de adopción, el presidente Kirchner firmó, el 28 de abril, el decreto 383 que permite la creación de un Registro Nacional Único de Adopción. Este empezará a funcionar dentro de 3 meses. El registro fue elaborado por especialistas en derecho de familias y pretende agilizar los trámites de adopción y guarda de menores.
El ministro de justicia, Horacio Rosatti, sostiene que el gobierno pretende a través del registro único evitar la peregrinación de personas que quieren adoptar o tener en guarda a un menor y deambulan de provincia en provincia.
Mendoza es una de las provincias que desde el 2000 cuenta con el Registro Único de Adopción (RUA), si bien ha dado buenos resultados y personas de otras provincias se acercan a él para inscribirse, existe demoras de 4 años en los trámites. Este Registro provincial no se adherirá por el momento al sistema nacional, hasta ver como funciona.
Cristina E. Mancin
Departamento de Sociedad y Movimientos Sociales