El incremento fue acordado por el Ministerio de Educación y el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) con el gremio no docente Fatun y con los sindicatos docentes Conadu, Fedun y Ctera (preuniversitarios), pero no con la Conadu Histórica, que la próxima semana realizará un paro de actividades. Los aumentos comenzarán a instrumentarse en junio y se completarán en agosto. En el caso de los docentes, si bien aún no se definieron los montos a otorgar en cada categoría, se contempla la aplicación de una suma “adicional no remunerativa” de un 19,9 por ciento a partir del mes que viene, que se convertirá, junto al “estímulo 2005”, en remunerativa desde agosto. En el caso de los trabajadores no docentes, la mejora consistirá en dos sumas fijas no remunerativas, a cobrar en el mismo lapso, con variaciones según las categorías: desde 110 pesos para la escala más baja y hasta 330 para la categoría superior en junio, y 80 y 240 pesos en agosto. “El Gobierno está haciendo un gran esfuerzo por mejorar los salarios universitarios, que se suma a los aumentos acordados el año pasado y que se están terminando de aplicar el mes que viene”, dijo Malcolm. Para terminar de negociar los modos de aplicación del incremento, el miércoles habrá una nueva reunión de funcionarios y gremialistas. Para entonces, desde el 22 y hasta el 24, estará en marcha un paro nacional convocado por la Conadu Histórica, el único de los gremios docentes que no aceptó la oferta oficial por considerarla insuficiente. La divergencia en la postura sindical ante el Gobierno marcará, posiblemente, una nueva ruptura en el frente de unidad que venían construyendo las dos Conadu.