La medida de fuerza había sido convocada por los docentes tras el fracaso de las negociaciones salariales iniciadas entre los gremios, el Ministerio de Educación y los rectores universitarios.
Postergada una recomposición salarial, el punto principal a resolver es la incorporación al sueldo de los adicionales no remunerativos y no bonificables que integran cerca del 40 por ciento de los ingresos de los profesores. Las autoridades garantizaron el blanqueo a partir del 1º de julio, pero la falta de un cronograma concreto de aplicación no satisfizo a la Conadu Histórica ni a la Conadu.
Durante hoy y mañana ambos sindicatos harán sus respectivos congresos para definir la continuidad de sus acciones y reclamos. En las dos organizaciones se están promoviendo encuestas a los afiliados para definir medidas de fuerza con el mayor consenso posible. Algunas de las medidas en discusión son un paro de 96 horas (podría ser del 21 al 24 de este mes), la suspensión de la toma de exámenes en julio y el no inicio de las clases en el segundo cuatrimestre. Habrá que ver si se alcanza algún acuerdo el próximo jueves 23, cuando se realice una nueva reunión de la comisión negociadora.