Para “salvaguardar los mayores intereses de la institución”, Dalfaro le ofreció su dimisión al vicerrector Martín Romano, quien la aceptó y quedó a cargo de la UNaF. A su vez, el ya ex rector solicitó más tiempo para presentar su defensa ante la asamblea universitaria. Por su parte, Quijano argumentó que renunciaba ante “una decidida campaña de destrucción de su persona” que le había producido “un extenuante cansancio moral”. Para las 20 de ayer estaba convocada la asamblea universitaria –integrada por 84 representantes de profesores, graduados y alumnos–, que debía resolver si el rector y el decano habían incumplido sus funciones. Ya la semana pasada, tanto una comisión investigadora de la UNaF como el Ministerio de Educación habían confirmado la invalidez de los convenios firmados por las autoridades académicas con los institutos World College (Tierra del Fuego) y Cibernos (Madrid), por medio de los que 17 alumnos españoles recibieron diplomas no autorizados.
Página 12: RENUNCIAS
Antes de que la asamblea de la Universidad Nacional de Formosa comenzara anoche a analizar la responsabilidad de las autoridades en el escándalo por los títulos truchos expedidos en España, el rector Carlos Dalfaro y el decano de Administración, Héctor Quijano, presentaron la renuncia a sus cargos.