La comuna elaboró una propuesta de modificación del Código de Edificación de la Provincia.
En los últimos años, la Capital ha perdido población para empezar a convertirse en un área de servicios, al tiempo que el crecimiento urbano sólo se registra en el oeste del departamento, que es un área de fragilidad ambiental. Por otra parte, existen zonas que cuentan con buena infraestructura de servicios pero están deprimidas.
Por eso, la comuna ha presentado una primera propuesta para actualizar el Código de Edificación con el objetivo de continuar creciendo sin afectar zonas residenciales ni el patrimonio ambiental.
La mira está puesta en desarrollar la Cuarta Sección Este y el entorno del Parque Central (Primera Sección). En el primer caso, se prohibirá la instalación de nuevos galpones y se alentará el desmantelamiento de los existentes, como también se promoverá la unificación de parcelas para construir conjuntos habitacionales. Y en el entorno del Parque Central, donde la comuna cuenta con varios inmuebles que pondrá a la venta durante este año, se apuntará a la construcción de edificios y también al englobamiento de parcelas.
La síntesis que presentaron ayer la directora de Planificación Urbanística de la comuna, Silvana Bragagnini, y la jefa de Planificación, María Eugenia Bargna, servirá para elaborar un proyecto de ordenanza, que deberá tratar el Concejo. Además de diseñar estrategias para mitigar los efectos negativos de ciertos desarrollos actuales y de trabajar en un plan de crecimiento futuro, con esta actualización del código se pretende evitar las cuestionadas excepciones.
Los estudios realizados permitieron establecer que la ciudad está creciendo únicamente hacia el pedemonte, que es un área de fragilidad ambiental y que además demanda una importante inversión dotarla de servicios. En contraste, la Cuarta Este cuenta con infraestructura pero hay muchos terrenos desocupados, por lo que se creará un registro de propiedades disponibles en cada manzana de este sector, que estará a disposición de los inversores.
El diagnóstico mostró que la ciudad ha ido creciendo con un modelo difuso y que se debe apuntar a una urbe compacta, con lo que se optimizan los recursos y se disminuyen los traslados en vehículos particulares, lo que a su vez contribuye a reducir la contaminación ambiental. Se buscará densificar las zonas deprimidas, se promoverá la unificación de terrenos y se premiará un uso eficiente de la energía en los edificios en altura.
En cuanto a este tipo de edificaciones, se propone que el basamento -la altura de los primeros niveles de la construcción- pase de 12 metros a 10. Se incrementará el retiro posterior para preservar el corazón de manzana (área que cuando queda como espacio verde permite dispersar el calor), y en cambio se reducirán los retiros laterales. Se establecerá una nueva relación entre ancho y profundidad de los edificios para evitar placas, (construcciones que presentan una "pared" a los vientos y el sol).
Aportes de distintos sectores
La propuesta de modificación del código de edificación de Capital se elaboró en la Dirección de Planificación Urbanística de la comuna, con el aporte de distintas entidades profesionales (Colegio de Arquitectos de Mendoza, Cámara de la Construcción) y de investigación (Cricyt, Instituto de Energía de la Facultad de Ingeniería de la UNCuyo), empresas de servicios públicos (Edemsa, Obras Sanitarias Mendoza) y empresarios de la construcción.
El lunes se ha citado a una reunión a representantes de estas entidades para presentarles una síntesis del trabajo y las propuestas. El presidente del Colegio de Arquitectos de Mendoza, Gerardo Montaruli, comentó que está previsto que luego haya espacio para el debate ya que con el pedido de sugerencias a todas las partes se buscó contemplar los diferentes intereses.
En números
Población. Entre el Censo de 1991 y el de 2001 se registró una disminución de 8% en la cantidad de habitantes en la ciudad, mientras 16% de las viviendas dejaron de usarse con fines residenciales y se les dio otro uso.
Pirámide poblacional. 19% de las personas que vive en Capital tiene más de 60 años y 60% son mujeres. También hay una gran cantidad de estudiantes universitarios, ya que los centros de educación superior en el departamento concentran 89% de los alumnos de toda la provincia.
Espacios verdes. En Capital hay 25 metros cuadrados de espacios verdes por habitante si se incorpora el Parque General San Martín o 16 m2/hab si en lugar de ese parque se considera el arbolado público. El estándar internacional para ciudades de hasta 500 mil habitantes recomienda una proporción de 10 a 20 m2/hab. Este es el patrimonio ambiental que se busca preservar.