Hablar del tema, conocerlo, disipar dudas, generar conductas saludables y realizar controles médicos periódicos son acciones fundamentales para vencer el miedo al cáncer.
¿Qué podemos hacer para prevenir el cáncer?
Existen algunas conductas que podemos adoptar para descartar los factores de riesgo más preponderante y generar estilos de vida mucho más saludables. Entre ellas, mantener una nutrición adecuada que excluya el consumo de alimentos con altos niveles en grasas, azúcar y sal; realizar ejercicio físico; no exponernos al sol incorrectamente y evitar hábitos perjudiciales como fumar y el sedentarismo.
En cuanto a la salud de la mujer, se puede reducir el impacto del cáncer de cuello uterino mediante la colocación de vacunas y fundamentalmente la detección precoz. En este sentido el papanicolau, las mamografías y los estudios digestivos permiten ampliar las posibilidades de curación.
El crecimiento de la tecnología aplicada permite tener mejores estudios y diagnósticos, lo cual facilita conocer la enfermedad para la selección de una adecuada estrategia de tratamiento más individualizada. Muchos tumores malignos son curables si se detectan y se tratan a tiempo.
Así, se suman mejores medicamentos, más efectivos, menos tóxicos, radioterapia más precisa y cirugías menos agresivas que conserven la integridad de la persona.
En cuanto al rol del equipo de salud, el trabajo multidisciplinario suma la integración de la psico-oncología, el apoyo nutricional específico y los cuidados paliativos en pos de nuestra calidad de vida. También la investigación va acercando permanentemente nuevas opciones.
El Hospital Universitario cuenta con éstos equipos de trabajo para atender y asesorar cualquier inquietud, vacunatorio y equipamiento tecnológico necesarios para prevenir y diagnosticar en forma temprana.
Tanto el temor de no querer saber como el silencio, condicionan y perjudican al paciente y a su familia. Sólo desde la comunicación, el diálogo y el conocimiento de la enfermedad y de sus tratamientos es posible trabajar sobre objetivos claros desde una perspectiva más humana para tomar decisiones propias no sólo contra el cáncer, sino a favor de nuestra salud.