La enfermedad renal crónica (ERC) es el daño progresivo e irreversible de los riñones que afecta a la salud de todo el organismo y puede generar fallo o enfermedad renal terminal. En esos casos se requiere tratamientos sustitutivos como diálisis o trasplante. La ERC induce ataques cardíacos y cerebrales si no es tratada, además no da síntomas ni signos hasta etapas avanzadas de daño renal, es silenciosa y agresiva.
La ERC es tratable, con recomendaciones especiales y medicación adecuada se puede demorar su progresión y disminuir los riesgos cardiovasculares.
A través de un análisis de sangre se mide la creatinina, una sustancia que proviene del metabolismo de las proteínas de los músculos, y que se elimina por el riñón. Cuando hay daño renal esta sustancia se filtra menos y se acumula aumentando su nivel en sangre. Con este análisis y datos referentes a edad y sexo, se calcula en qué medida está filtrando el riñón. Por otra parte, con un análisis de orina se chequea si hay pérdida de proteínas por el riñón (proteinuria). Con estos 3 elementos el médico puede hacer un diagnóstico de la función renal y determinar la presencia y el grado de ERC. Desde el momento que el diagnóstico de una persona indica una enfermedad renal crónica, comienza a intervenir un nefrólogo.
Riñón y envejecimiento
Si bien la enfermedad renal crónica puede ocurrir en cualquier momento de la vida, es frecuente su manifestación con en adultos mayores. Se considera que cerca del 10% de la población adulta tiene algún grado de daño renal. Principalmente dentro la población entre 65 y 74 años, 1 de cada 5 varones y 1 de cada 4 mujeres tiene ERC, y la mitad de los mayores de 75 años también padecen estos daños.
La función de los riñones
Son los responsables de fabricar la orina, eliminar las toxinas y el exceso de líquidos y controlar el balance químico. Además, ayudan a controlar la presión arterial, favorecen la salud de sus huesos y colaboran con la fabricación de los glóbulos rojos.
Cómo saber si el paciente está en riesgo
Existe una serie de preguntas que pueden orientar al paciente para saber si sus riñones están en riego, como por ejemplo: ¿Tiene usted hipertensión arterial?, ¿Es usted diabético?, ¿Tiene historia familiar de enfermedad renal?, ¿Tiene sobrepeso o es usted obeso?, ¿Tiene más de 50 años de edad?
Si el paciente confirma una o más de estas preguntas tiene que consultar al doctor para chequear la posibilidad enfermedad renal. En el Hospital Universitario existe el Servicio de Nefrología que puede ayudar al paciente con las dudas.
Reglas básicas para prevenir la ERC
Mantenerse en forma y activo haciendo ejercicio físico para combatir sedentarismo. No fumar
Controlar regularmente la glucemia, lípidos y anemia y monitorear la presión arterial.
Comer sano, disminuir el consumo de sal y cuidar el peso.
Realizar una ingesta saludable de líquidos, de un litro y medio a dos litros de agua por día. Se recomienda tomar un vaso con agua todos los días antes del desayuno.
No tomar en forma rutinaria y prolongada antiinflamatorios, evitando la automedicación.
Asistir periódicamente al médico si presenta factores de riesgo (diabetes, hipertensión arterial, enfermedad cardíaca, sobrepeso, familiares con enfermedad renal o es mayor de 50 años) para determinar si tiene enfermedad renal.