Por Daniel Calivares
Departamento de Cultura
4000 personas para los gremios, poco más de 1500 para el gobierno de Mendoza fue la cantidad de personas que el martes 23 de agosto marcharon en reclamo de mejores sueldos, en contra del decreto del gobernador mendocino Julio Cobos que prevé un aumento del 10% para los estatales, suba que los gremios consideran insuficiente y en reclamo de una reforma a la ley tributaria de la provincia.
Asistieron a la marcha representantes de Judiciales, del SUTE, ATE, CTA, SITEA, Sindicato de televisión y de Gráficos, trabajadores de los hospitales Notti, Central, Pereyra, El Sauce, Lencinas, Paroissien; FADIUNC, y numerosos centros de estudiantes y agrupaciones provenientes de la Universidad Nacional de Cuyo.
A diferencia del Ministro de Gobierno, Gabriel Fidel, que afirmó que el paro estatal no se había sentido y que la actividad había sido normal, Gustavo Maure, titular del SUTE, le indicó a Agencia Taller, que el paro fue un éxito y que "la movilización pone en claro que los trabajadores ya no nos dejamos amedrentar, no hay amenazas, no hay declaraciones públicas del gobierno y del Ejecutivo que frene la demanda por un salario justo, digno y discutido con los trabajadores, no por un decretazo".
Otro que también tuvo palabras contra el gobierno de Cobos fue Carlos Ordoñez, titular del Gremio Judicial, quien en su discurso afirmó "hemos escuchado a nuestro gobernador decir que no hay nada más para repartir, que el aumento es del 10% y que haciéndose el democrático, autoritariamente, rompiendo y violando abiertamente el marco de las paritarias, lo va a otorgar por decreto" y agregó "sí hay más recursos, lo que no hay es voluntad política y coraje de ir a cobrarle a los grandes evasores, a aquellos que le pagaron la campaña".
En consonancia con Ordoñez, Maure afirmó que Mendoza "es un paraíso fiscal" y que debido a esta razón hay empresas que "se están comprando el Valle de Uco y el sur" y lanzó una advertencia al gobierno "lo nuestro no es una tormenta preelectoral, que se preparen, porque vamos por la reforma de la ley tributaria".
Yo te denuncio
Durante los discursos se escucharon dos denuncias que desataron los aplausos de los asistentes a la explanada de Casa de Gobierno.
La primera denuncia la realizó Raquel Blas, secretaria adjunta de ATE, que manifestó su "repudio a las actitudes cobardes y represivas del Ministro de Salud Armando Calleti que no sólo nos ha querido limitar las asambleas, sino que ha llegado al extremo de amenazar a los compañeros contratados con dejarlos sin trabajo".
La segunda denuncia la formuló Carmelo Cortese, de FADIUNC, quien acusó a un sector del periodismo de ponerse en contra de los trabajadores, "hay algunos periodistas, uno a nivel nacional, (Mariano) Grondona, que pide que repriman, pero ya sabemos, Grondona fue parte de los golpes de Estado y otro párrafo para el editorialista Jaime Correas, editorialista de Diario Uno, que se dedica a denigrar a cuanta lucha de trabajadores de Mendoza haya y ahora se metió con los trabajadores de la educación" y luego agregó "no recordamos editoriales dirigidos a los vaciadores del Banco de Mendoza, no recordamos editoriales dirigidos a los grupos económicos que han concentrado la riqueza".
Lo que viene
El día viernes 26 mientras el Ministro de Hacienda, Alejandro Gallego, y el vicegobernador Juan Carlos Jaliff anunciaban el aumento de entre 10% y 15% para los estatales que entrará en rigor a partir del próximo 31 de agosto, en la explanada de Casa de Gobierno los trabajadores llevaban a cabo un plenario donde decidían las medidas a tomar frente al decreto que establece una suba del 15% para los que cobran menos de $700, de un 12$ hasta los $1200 y de un 10% para los que ganen más de esta suma.
Entre los discursos que se pudieron oír hubo varias críticas contra la conducción de la obra social de los empleados públicos (OSEP), contra la subsecretaría de trabajo, a la que Maure se refirió como "un apéndice del gobierno de turno" y agregó que "le anda perdonando la vida a aquellas empresas que se dedican a lo agroalimentario (...) pero para cercenar los derechos de los trabajadores se multiplican los botones en cada uno de los lugares"
Si bien el gobierno había dado aviso de que el anuncio de la suba de salario se podía dar ese día la noticia cayó como un baldazo de agua fría para los estatales reunidos.
Una vez que el golpe pasó y después de más de dos horas de reunión y oratorias, el plenario decidió que todos los días viernes habrá una protesta que podría incluir paros, asambleas, cortes, piquetes; con una campaña de discusión hacia la comunidad mendocina respecto a la desigual distribución de la riqueza en la provincia y que la multisectorial se dará a la tarea de fijar una nueva fecha para otro paro general.
Además se votó a favor de la realización de escraches a funcionarios públicos, ya sean del gobierno o legisladores en cada aparición pública que estos tuviesen y a realizar acciones para que OSEP pase a mano de los trabajadores.