El gobernador de Formosa, Gildo Insfrán y el gobernador de Tucumán, Jorge Alperovich respaldaron el proyecto de coparticipación del gobierno nacional. Este último cargó contra su par bonaerense y señaló que “para nada sirve la vieja lucha de pegar para después negociar”, en alusión a la estrategia confrontativa de Solá.
Insfrán y Alperovich, se suman a otros ocho mandatarios provinciales que ya han dado el “visto bueno” a la futura ley de Coparticipación Federal. Estos mandatarios son los radicales Julio Cobos (Mendoza) y Miguel Saiz (Río Negro) y los gobernadores del PJ Eduardo Fellner (Jujuy), Jorge Obeid (Santa Fe), Carlos Verna (La Pampa), Sergio Acevedo (Santa Cruz), Carlos Rovira (Misiones) y Mario Das Neves (Chubut).
Por otro lado también se espera el respaldo de los gobernadores de San Luis, Alberto Rodríguez Saá y Tierra del Fuego, Jorge Colazo.
En tanto, el solitario Felipe Solá reclama una deuda de la Nación con la provincia de 460 millones de pesos y el aumento, en ocho puntos, de las partidas coparticipables para Buenos Aires. Además manifestó este jueves su intención de reunirse "pronto" con el presidente Néstor Kirchner para "avanzar" sobre el tema de la nueva ley de Coparticipación Federal y, en ese sentido, reiteró que se puso al frente de la provincia para "defenderla y no para quedar bien con nadie" y que, para eso, tiene que "administrarla bien y pelear por sus ingresos".
Entre tantas idas y venidas el presidente Kirchner, fiel a su costumbre propagandística de herir y no pegar, adelantó que "no hay ruptura" con el ex mandatario Eduardo Duhalde ni con el gobernador Felipe Solá.
Por otro lado, con respecto al hipotético apoyo de Duhalde al gobernador bonaerense, el ministro de Interior, Aníbal Fernández, aclaró que en la discusión entre la Nación y la provincia de Buenos Aires por la ley de coparticipación federal el "actor principal" es el gobernador Felipe Solá y no el ex presidente Eduardo Duhalde.
Por lo tanto, hasta ahora, la idea ha sido tirarle la piedra a Solá; para que “bajo presión” acceda a los lineamientos de la nueva ley de fondos coparticipables. Lo cierto es que, históricamente, Buenos Aires siempre ha tenido un peso determinante en el momento de “arreglar” números con la Nación.
No es de extrañarse que esta novela –Das Neves dijo que esto se parece a un culebrón venezolano—tenga su punto culminante cuando en tres días arribe al país la misión del Fondo Monetario Internacional (FMI) para realizar la tercera revisión del acuerdo vigente.
No hay que olvidar que en todo culebrón, al final, algunos terminan felices para siempre y otros reciben su recompensa ¿Quién reirá? No se sabe.
Ezequiel Derhun
Ezequielderhun@hotmail.com
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22 de noviembre de 2024
