La Escuela de Música de la UNCuyo estrenará aulas teóricas, de percusión y de ensamble, una biblioteca, ascensor, una sala de profesores, una cocina y un baño en administración en una superficie de 1395 m². La inversión supera los 29,8 millones de pesos.
Los flamantes espacios integran la segunda etapa del edificio de la Escuela, que por sus características innovadoras, la hacen única en la Argentina. Así, en una de sus salas puede generarse 100 decibelios (dB), y no "escucharse" el sonido en un espacio contiguo (medido con decibelímetro). Para ejemplificar, dentro de una discoteca se generan unos 110 dB, o los taladrados que producen 120 dB. Es un nivel muy alto de ruido.
En la Escuela de Música se enseña a tocar instrumentos musicales, que tienen propiedades diferentes. Estos requieren que los recintos cumplan determinadas propiedades necesarias tanto para el acondicionamiento acústico como para el control de ruidos. Para ello se puso la lupa en los aspectos constructivos de los cerramientos de los locales y aulas y en las terminaciones interiores de los distintos elementos de revestimientos.
Debido a las altas exigencias a nivel acústico se desarrolló un sistema aislante que recubre las paredes de las aulas para evitar el ingreso y egreso del sonido generado en cada recinto. A ese sistema lo integran distintas capas, entre ellas una capa de aire, lana de vidrio, placas de roca de yeso y la presencia del uso de una placa de absorbencia acústica que le da terminación tanto estética como funcional.
Desde la concepción del edificio se buscó generar espacios para que el aprendizaje del sonido fuera el eje fundamental para tomar decisiones tanto desde el punto de vista funcional como desde la estética final de los ambientes.
En los aspectos espaciales y formales el proyecto del edificio responde a una austeridad expresiva y a la eliminación de todo elemento superfluo. Esa economía en lo expresivo apuntó además a concentrar recursos en el mejoramiento tecnológico de la propuesta, particularmente en su comportamiento termo-lumínico-energético y acústico.
Los volúmenes simples de bloque de hormigón común visto, se articulan con una cubierta de losa, lo que permite tener ganancia solar, dejando a su vez, una terraza superior con acceso peatonal.
El sistema constructivo se basa principalmente en losas de hormigón armado, sustentadas mediante tabiques y pórticos de hormigón armado y muros de mampostería de bloques de hormigón. Todo el sistema de fundación está compuesto por zapatas corridas, bases aisladas y pozos de fundación de hormigón armado.
Inauguración
La segunda etapa del inmueble, que se ubica frente a la facultad de Artes y Diseño, en el Campus de la UNCuyo, se presentará el martes 24 de abril, a las 19.