Con la premisa de fortalecer el intercambio y la integración cultural para enriquecer la movilidad entre universidades, la secretaría de Relaciones Internacionales preparó la «Semana Internacional» para los más de 150 extranjeros que eligieron la UNCuyo para realizar su estadía académica.

Parte de esa experiencia de intercambio se vivenció en la «Feria Internacional», en la que los jóvenes del exterior compartieron con los universitarios mendocinos tradiciones culinarias y distintas formas de expresión artística, propias de su país. En ese sentido se degustaron y saborearon platos típicos europeos como salchichas y strudel  alemán; gazpacho danes; crepes y tarte tatin francés, y las pastas 3P y bruschetta italiana.

Del lado de Latinoamerica hubo pastelitos y chocotorta argentina, caipirinha y feijoada brasilera, café y arepa colombiana, tacos y chimichanga mexicanas, chajá uruguayo y pebre chileno, entre otros.

Acompañaron la propuesta los vinos blanco Chardonnay y tinto Cabernet Sauvignon, que compartieron alumnos de la facultad de Ciencias Agrarias.

En ese ámbito, la responsable del departamento de Movilidad Estudiantil, Valeria Caroglio, explicó que la intención fue «dar a conocer a la comunidad universitaria todas las actividades en las que participan los estudiantes extranjeros y mostrar los rasgos culturales más sobresalientes que tienen que ver con la comida, la música, y algunas costumbres».

Semana Internacional.  Dentro del itinerario de actividades se inauguró la «Muestra Fotográfica Internacional», compuesta por 25 fotos que registraron estudiantes extranjeros de distintos paisajes, lugares y costumbres de Mendoza, y las que tomaron los alumnos de la UNCuyo que estudian en el exterior. Se podrá visitar hasta el 21 de octubre en el Comedor.

Otra de las iniciativas fue el «Mundialito de fútbol», una jornada deportiva y recreativa con alumnos locales y extranjeros, y tutores de movilidad estudiantil. Para el torneo se armaron 2 equipos mixtos, compuestos por integrantes de diferentes nacionalidades. El enfrentamiento se dividió en dos tiempos: en el primero venció el equipo rosado, integrado por estudiantes bolivianos, daneses, alemanes y argentinos. En tanto que la segunda parte el triunfo fue del equipo verde, compuesto en su mayoría por colombianos, algunos mejicanos y argentinos.