Saltar a contenido principal Saltar a navegación principal

Un reconocimiento para testigos sobrevivientes de la dictadura

Lo recibieron más de 50 personas que dieron su testimonio en las audiencias de la Megacausa por delitos de lesa humanidad en Mendoza. Fue por iniciativa del área de Articulación Social de la UNCuyo, el colectivo Juicios Mendoza y la Biblioteca General San Martín.

imagen Un reconocimiento para testigos sobrevivientes de la dictadura

Se concretó un reconocimiento a las y los testigos sobrevivientes del IV Juicio por Delitos de Lesa Humanidad.

Más de 50 testigos sobrevivientes de la última dictadura militar que participaron con sus testimonios en las audiencias por el IV Juicio por Delitos de Lesa Humanidad en Mendoza vivieron una jornada emotiva en la Biblioteca General San Martín. Allí se los reconoció con una fotografía que recuerda su paso por el proceso judicial. 

El IV Juicio, también conocido como Megacausa, duró tres años y medio y transitaron por él más de 200 personas. Cobró relevancia porque además de juzgar militares y policías, cuestionó y condenó finalmente la participación de la cúpula judicial federal de aquel entonces. El Tribunal consideró que sin el aporte judicial, las fuerzas militares y policiales no podrían haber cometido crímenes de esa magnitud. La sentencia fue el 26 de julio del 2016.

“Fui Testigo. Reconocimiento a las y los testigos sobrevivientes del IV Juicio por Delitos de Lesa Humanidad” llevó por nombre la iniciativa. Se inscribió en las acciones de la Línea Institucional de Derechos Humanos del área de Articulación Social de la UNCuyo y la organizaron el Colectivo Juicios Mendoza junto a la Biblioteca Pública mendocina.

En ese contexto, se presentaron a los integrantes del Colectivo Juicios Mendoza. Entre ellos se encontraban Carmen Dolz, Sofía D'Andrea, Gustavo De Marinis, Silvia Faget, Reynaldo Illa, Alejandra Ciriza, Valeria Fernández Hasan, Juan Abarca, Laura Rodríguez Agüero, Ivana Ilardo y Julia López.

Juicios Mendoza está conformado por miembros de los Organismos de DDHH de la Provincia, estudiantes y docentes de la UNCuyo. Su tarea consistió en registrar cada audiencia del Juicio a través de crónicas y fotografías, las que poseen un destacado valor documental y testimonial. Tanto ese material como los perfiles de personas desaparecidas en esa década se encuentran en https://juiciosmendoza.wordpress.com/

Sofía D'Andrea, de la Asociación de Expresos y Expresas Políticas, presentó a Ana María Careaga, quien participó como invitada especial y, en ese contexto, se pronunció: “Los relatos y testimonios en las audiencias de los juicios, son testimonios tangibles e intangibles basados en los significantes de memoria verdad y justicia. Es por eso que hoy la pregunta de la desaparición nos resuena en el cuerpo y se reactualiza en esa inscripción. Hoy todos somos testigos de esa desaparición y esa imagen que se multiplica una y otra vez en los espacios públicos nos acompaña e interpela en nuestra propia mirada, desde esa otra mirada buena que nos interroga una y otra vez ¿Dónde está Santiago Maldonado?”

Además de ser sobreviviente, Ana María Careaga integra el equipo de acompañamiento de los Juicios de lesa humanidad en Buenos Aires. Fue secuestrada el 13 de junio de 1977 cuando tenía tan sólo tenía 16 años y estaba embarazada. Permaneció secuestrada en Club Atlético (CABA), un almacén de suministros de la Policía Federal que había sido acondicionado como campo de concentración, y que si bien estaba a cargo la Policía Federal, era utilizado conjuntamente por las diferentes armas y particularmente por el Ejército. Estuvo secuestrada 4 meses en ese centro clandestino de detención. Entre los torturadores que identificó, y cuyos nombres proporcionó al juez Garzón, se encontraba el sargento primero de la Policía Federal Julio Simón, alias "el turco Julián".

Al equipo de acompañamiento que apoyó a los testigos para contar lo sucedido, conformado por Ana Montenegro, Sara Gutiérrez, Graciela Alaniz, Gabriela Marín, Inés Nieto, Mariana Potashner, Mercedes Cuervo y Jorge Barandica, también se los reconoció por su tarea con un grabado original de la artista Agustina Quesada.

Cabe resaltar que en la última década la UNCuyo tuvo un papel activo como promotor e impulsor de las reivindicaciones en materia de Derechos Humanos.  Por ello, en el encuentro se entregó una mención especial para el área de Articulación Social e Inclusión Educativa de la Casa de Estudios, que dirige José Rodríguez. Desde la Línea Institucional de Derechos Humanos de ese Área se pretende favorecer la construcción de Memoria, Verdad y Justicia en Mendoza, a partir del diálogo y la articulación institucional en conjunto con los Organismos de Derechos Humanos a nivel provincial.

Para conocer más del trabajo de la Línea de Derechos Humanos comunicarse al 4135000, interno 3076, o escribir a: ddhh@uncu.edu.ar

Contenido relacionado