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Una alternativa estatal para “emparchar” un problema de años

La Empresa Provincial de Transportes de Mendoza (EPTM) es una de las pocas empresas estatales que sobrevivieron a la ola privatizadora de los años 90. Si bien se realizaron varios intentos privatizadores, el más intenso fue en el año 2001, frenado por el trabajo conjunto de los empleados y las minorías legislativas (Partido Socialista y Polo Social).

18 de octubre de 2005, 01:38.

Por Juan Lencioni

Agencia Taller – Departamento de Política

juanlencioni@hotmail.com

Esta empresa, de 45 años de antigüedad, se ha convertido en una pieza estratégica en el proceso de renovación del transporte público de pasajeros de nuestra provincia encarado por el gobernador Julio Cobos. Los recorridos cubiertos por la EPTM representan el 20% de los 10 grupos recientemente concesionados. Están a su cargo: el grupo 2, que absorbió los recorridos de la anterior línea 20, las líneas 240 y 300 de media distancia y la línea T Pedro Molina-UNIMEV. Además de las 5 líneas de trolebuses vigentes (Villanueva, Dorrego, Godoy Cruz-Las Heras, Pellegrini, Parque) y el nuevo recorrido a la Universidad Nacional de Cuyo.

Su directora, Amalia Monserrat, esbozó un organigrama de la empresa: “Este es un organismo estatal descentralizado que depende del Ministerio de Ambiente y Obras Públicas, y que se maneja con su propio presupuesto. Hay un directorio, en el que yo soy la directora gerente. Hay un director por el Poder Ejecutivo, Leopoldo Cairone; y un director elegido por los empleados cada 2 años: Osvaldo Sales, un chofer de la empresa. Yo estoy acá desde diciembre de 2003, fui convocada por el Ing. Cobos desde que asumió como gobernador”.

En la EPTM trabajan 540 empleados, de los cuales el 60% son choferes. Cuenta con 126 colectivos y 55 trolebuses, con una antigüedad promedio de 35 años. Estas unidades, de fabricación alemana, requieren un mantenimiento muy cuidadoso porque los repuestos ya no se consiguen. La puesta en marcha de los 8 troles para la nueva línea demandó una inversión de $250.000. El presupuesto 2005 es 8 millones de pesos y para el 2006 se estima una recaudación cercana a los $15 millones.

Conflictos gremiales

Esta apuesta del Gobierno, de fortalecer a la EPTM, comenzó a demostrar sus debilidades cuando el sector gremial paralizó la totalidad de los recorridos de la empresa en 2 oportunidades. Los empleados reclamaban un aumento en el sueldo básico, que actualmente es de $90. Consultada al respecto Monserrat señaló: “Un chofer cobra entre $1.100 y $1.200. Ningún sueldo está por debajo de los 800 pesos. Si bien el básico es bajo, se incrementa por los distintos aumentos otorgados. El Gobierno está haciendo lentamente lo que puede para poner la escala salarial al nivel de la canasta familiar”.

Los gremios elaborarán para diciembre un convenio colectivo. “Estamos apretados económicamente porque pensábamos que este aumento iba a ser mejor darlo cuando nos pagaran el costo-kilómetro que corresponde. Trolebuses no tiene subsidio del Estado. La energía la pagamos igual que cualquier gran consumidor”, señaló la titular del organismo.

Si bien existe un interés manifiesto del Ejecutivo provincial por solucionar el problema del transporte público, se advierte una constante improvisación en cada nueva decisión. Amalia Monserrat comentó que “en todos los casos tuvimos que salir con necesidad y urgencia. Nos pasó con la línea 240, lo mismo sucedió en Lavalle con la línea 300. Por otro lado, en breve, vamos instalar el mismo sistema prepago que adopte el Ejecutivo. Vamos a recibir la misma cantidad de dinero por kilómetro que reciban los privados. La Dirección de Vías y Medios de Transporte nos va a controlar y multar igual que a las otras empresas”.

Nuevo recorrido e inversiones futuras

Este fin de semana comenzaron a circular los troles de la nueva línea a la Universidad Nacional de Cuyo. Tienen una frecuencia de 8 minutos en hora pico y de 12 a 14 minutos en las horas valle. Los sábados la frecuencia es de un trole cada 15 minutos y los domingos uno cada 18 minutos. Se estima que en esta línea se transportará a 1.200.000 pasajeros. La inversión fue de 2,4 millones de pesos. Los alumnos universitarios solo abonarán el 50% del pasaje, pero deberán adquirir los abonos presentando un certificado solo en la sede de calle Perú.

Consultada sobre las sucesivas postergaciones en la inauguración la directora contestó: “Tuvimos demoras en las entregas de materiales. No hay empresas especializadas en el medio para este tipo de obras. Los elementos son únicos y se fabricaron a medida. Luego del mes de prueba reglamentario ya estamos en condiciones de inaugurar”. Seguramente no solo el vencimiento de los plazos de ejecución de obra ha apurado esta inauguración sino la proximidad con las elecciones legislativas 2005.

Otras obras que ya cuentan con un monto cercano a los 2 millones de pesos son: la renovación de las subestaciones Villanueva y Dorrego. La renovación de cables para varias líneas. La ampliación de la Línea Dorrego y el mejoramiento de las oficinas de la empresa que funciona en dependencias que pertenecieron al ferrocarril.

Para Amalia Monserrat el trole tiene sus amantes y detractores, pero ya forma parte de la cultura de los mendocinos. “Se trata de un transporte ecológico, sin emisión de gases contaminantes, ni ruidos molestos, que se encuentra en clara expansión en todo el mundo. Requiere de una inversión alta pero los beneficios se comenzarán a advertir si se tiene en cuenta la escasez de los combustibles fósiles”.

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