La Universidad Nacional de Cuyo entregó, a comienzos de este ciclo lectivo, 1250 becas a estudiantes de toda la provincia. De acuerdo a la información otorgada por el personal de acción social de la universidad, esta cantidad de becas se distribuyen entre comedor, ayuda económica, y B.I.P.U (beca de ingreso y permanencia universitaria.)
Los beneficiarios de este sistema, tanto en Mendoza como en el resto del país, no solo tendrán la oportunidad de acceder a un estudio universitario sino también de intercambiar ideas, conocimientos e inquietudes con jóvenes de diferentes lugares de a Argentina.
Lo que en otras palabras redefine el rol de la Universidad en su vinculación con la comunidad toda, ante la evidente falta de recursos económicos de miles de jóvenes que no pueden acceder a un nivel educativo universitario.
No se puede ignorar, a su vez, que existen muchos alumnos que tienen posibilidad de un estudio pero no cuentan con el mínimo de información acerca de los diferentes lugares de donde provienen sus compañeros y en la mayoría de los casos la indiferencia los desborda.
Una clara intención de este sistema de becas, además de generar profesionales en distintas disciplinas, es fomentar el intercambio de costumbres ideas y hábitos de los jóvenes a lo largo y a lo ancho del país. Como ejemplo debemos destacar la posibilidad que se dio a la juventud de la comunidad Huarpe, en Mendoza, para acceder al mismo nivel educativo que el resto de la sociedad.
En definitiva, se ha comprobado a lo largo de los años que las becas son una forma de aportar al crecimiento cultural y contrarrestar además las diferencias en el nivel educativo entre los jóvenes, lo lamentable es que con esto no alcanza para borrar las desigualdades.
Silvina. L. Castro
Departamento Cultura