El dato de que en la provincia el 52% de los jóvenes de entre 15 y 24 años no estudia lo hizo público el miércoles la Universidad Nacional de Cuyo (UNCuyo) al dar a conocer los resultados del segundo informe del denominado Marco Estratégico Mendoza 2012.
Para la funcionaria, una de las principales causas de esta crisis educativa es que la “vieja secundaria” fue pensada para formar una clase media que hoy ya no existe.
Por eso consideró fundamental articular estrategias educativas que contemplen la realidad de cada sector socieconómico.
Puso como ejemplo el mismo informe de la universidad, que revela que “la situación es distinta en Capital que en Lavalle”.
El estudio de la UNCuyo señala que las situaciones menos favorables se observan en Lavalle, dónde sólo el 6% de estos jóvenes ha completado el secundario; en Santa Rosa, San Carlos, Malargüe y Tupungato, ese porcentaje se ubica entre el 9 y 10%.
Con relación al nivel de matriculación universitario, en Capital alcanza el 14%, mientras que el promedio provincial es del 4%.
Cunietti recordó que años atrás el porcentaje de jóvenes que no asistían a ninguno de los ciclos del sistema educativo era mucho mayor.
“Esto tiene que ver con que hoy han cambiado las exigencias para poder trabajar. Antes, con terminar el secundario alcanzaba hasta para ser un empresario. Hoy las exigencias han cambiado, se exige más para poder trabajar”, consideró.
Según la funcionaria, para resolver este problema deben generarse alternativas educativas nuevas, a la medida de cada persona.
“No es lo mismo la situación para un joven de 18 años que vive en San Carlos y que además de estudiar tiene que trabajar, por ejemplo, que la de otro que habita en Capital y vive con sus padres ”, graficó.
En este punto, la ministra coincide con el informe académico. Allí se consigna que, considerada la situación del grupo que va de 0 a 24 años, se observa que más de 356.000 residentes en los distintos departamentos de la provincia crecen en condiciones deficitarias, situación que limita su desarrollo social.
