El premio, creado en 1980 y dotado con dos millones de coronas suecas (268.000 dólares), fue anunciado durante una conferencia de prensa realizada en la ciudad india de Hyderabad y no en Suecia, como ocurre usualmente.
“Estoy contento por varios motivos. Básicamente porque estoy en medio de luchas muy fuertes y este premio de alguna manera permite difundirlas mejor, como la situación del pueblo Mbya Guaraní en Misiones, que habita en tierras cuyos árboles son talados sin control”, destacó Montenegro en diálogo telefónico con Télam desde la capital cordobesa.
“En cierto modo, este premio se lo tengo que agradecer a mi formación universitaria, que me permitió articular herramientas técnicas con gente que no podría acceder habitualmente a ellas –señaló el biólogo–. El resultado es increíble, porque cuando la gente empieza a manejar información que en general sólo circula en grupos académicos, se generan grandes avances”.
Montenegro, primer argentino en ser distinguido con el Nobel Alternativo, se desempeña como presidente de la Fundación para la Defensa del Ambiente (FUNAM) y como profesor titular de Biología Evolutiva en la Universidad Nacional de Córdoba.
La entrega del premio se realizará el 9 de diciembre en el Parlamento sueco, en Estocolmo.
El jurado destacó en el fallo que la trayectoria de Montenegro “muestra cómo un investigador comprometido y activista puede aumentar la conciencia ambiental y prevenir la degradación del ambiente”.
El biólogo obtuvo el premio por su labor al frente de actividades antinucleares, la creación de áreas naturales protegidas, el hallazgo y denuncia de depósitos de residuos tóxicos, el combate a la contaminación química y por campos magnéticos, la lucha contra la deforestación y la protección de los recursos hídricos.
“Se rinde honor a Montenegro por su sobresaliente trabajo con las comunidades locales y pueblos indígenas en defensa del ambiente y para conservar los recursos naturales tanto dentro como fuera de América Latina”, destacó el jurado.
El jurado hizo además una especial mención de su tarea con los vecinos de barrios afectados por problemas ambientales y de su reciente lucha en defensa del pueblo Mbya Guaraní.
Montenegro ya había recibido antes el Premio Global 500 de Naciones Unidas en Bélgica (1989), el Premio por un Futuro Libre de Nuclear en Austria (1992) y, mucho antes, el Premio a la Investigación Científica de la Universidad de Buenos Aires (1971).
“Me gusta ser un académico con los pies en el barro. Creo que le da una perspectiva distinta a mi actividad, ya que la ciencia por lo general nos encierra en una especie de torre de marfil que nos aleja del mundo cotidiano”, aseguró el biólogo.
“Creo que es importante establecer un sistema de ida y vuelta con la comunidad, conjugar pequeñas y grandes acciones. De hecho, las comunidades nos otorgan diariamente información muy valiosa que luego los científicos nos ocupamos de aplicar a nuestro campo de acción”, explicó Montenegro.
Otra de las galardonadas por el Nobel Alternativo fue Bianca Jagger, ex esposa del cantante de los Rolling Stones Mick Jagger, por su lucha en defensa de los derechos humanos, sobre todo contra la pena de muerte.